Fondo de emergencia: ¿cómo hacer uno?, ¿cuánto ahorrar?, y ¿dónde guardarlo?

Si hay una cosa que la adultez nos ha dejado clara es que el futuro es impredecible.

Nunca tenemos suficiente dinero ahorrado para imprevistos. Las emergencias, como su nombre indica, necesitan ser resueltas con prontitud o la magnitud del problema puede escalar. Estar preparados para futuros gastos, como una avería del coche o una factura inesperada, puede resultar algo bastante complicado.

La buena noticia es que tenemos una solución: ¡el fondo de emergencia! Este colchón de dinero es una excelente herramienta para afrontar las emergencias sin demasiado estrés y sin afectar gravemente nuestras finanzas.

Hoy estaremos hablando sobre este tema en nuestro artículo. Así que ya sabes, si te interesa conocer cómo llevar tu economía doméstica al próximo nivel y estar preparado financieramente para gastos imprevistos, entonces sigue leyendo.

¿Qué es un fondo de emergencia?

En pocas palabras, se trata de una cantidad de dinero que reservamos para momentos en los que se nos presenten gastos de forma inesperada o algún tipo de urgencia. Este fondo puede ser tanto en efectivo como en una cuenta bancaria. Funciona como una especie de colchón o defensa financiera ante las adversidades del día a día. Además, constituye una muy buena forma de ayudarte a conservar tu estabilidad económica.

Cómo ves, la utilidad de destinar una parte de tus ingresos o ahorros al fondo de emergencia está fuera de cualquier duda. Contar con este dinero de reserva para imprevistos te aportará seguridad y estabilidad para establecer metas más ambiciosas. Piensa que una vez tengas ese fondo preparado podrás plantearte otros proyectos sin riesgo de verte afectado por algún gasto urgente o no planificado.

¿Qué usos podemos darle a este colchón de dinero?

Ahora, ya sabemos qué es un fondo de emergencia, pero, ¿para qué podemos utilizarlo?

En realidad hay tantos usos como situaciones inesperadas en la vida de las personas. Por otro lado, no es mala idea establecer una serie de casos o situaciones en las que sí usarías este fondo y en cuáles no.

Hemos preparado un pequeño listado a partir del análisis de los datos de varias encuestas de los casos en los que los españoles están dispuestos a usar su fondo de emergencia.

• Gastos médicos
• Pago de alquiler o hipoteca
• Facturas inesperadas
• Multas
• Viajes de urgencia por temas familiares o laborales
• En caso de pérdida de trabajo

¿Qué opciones tengo si no poseo un fondo de emergencia?

En caso de que te resulte imposible por ahora preparar un fondo para emergencias, debes saber que existen alternativas. Nosotros te proponemos dos:

Tarjeta de crédito

Por un lado, tenemos las tarjetas de crédito. Si tuviésemos que elegir no sería nuestra primera opción. Son un producto financiero que trae consigo un alto riesgo y estimula el consumo desenfrenado Además los intereses suelen ser muy elevados, superando en algunos casos el 20%.

Si no cuentas con la posibilidad de separar parte de tus ingresos para tu fondo de emergencia, las tarjetas de crédito pueden cumplir esta función. Siempre ten en cuenta que son un gran riesgo, aunque usándolas con cabeza pueden ser una buena herramienta.

De más estar decir, que no debes olvidar pagar la tarjeta a final de meses para que no te apliquen nuevos cargos o intereses.

Préstamos personales urgentes

Otra opción pueden ser los préstamos personales urgentes. Si tienes una situación de emergencia o algún imprevisto económico, siempre puedes solicitar un préstamo personal. El problema está en que la oferta suele ser mucha y encontrar el préstamo que más se adapta a nuestras necesidades es un proceso complicado.

Es por ello que es necesario contar con webs y entidades financieras de confianza. Tras haber hecho un pequeño estudio de mercado, una de las plataformas que más nos llamó la atención fue Dinerio. Con ellos podrás encontrar una buena variedad de préstamos y créditos con bajos intereses y pocos requisitos. Su principal punto fuerte es la rapidez, una vez aprobado el préstamo recibiremos el dinero en cuestión de minutos.

Cómo hacer un fondo para gastos inesperados

Una vez que ya conocemos el concepto básico y los principales usos que podríamos darle a este fondo, es hora de ver cómo podemos cómo hacer un colchón para gastos de emergencia.

¿Cuánto dinero necesito tener ahorrado para imprevistos?

Lo primero es establecer una cantidad total. Para ello debemos estudiar cuáles serían los principales casos en los que usaríamos  el fondo y cuánto dinero necesitaríamos  para cubrir los gastos. Por regla general suelen tomarse como referencia nuestros gastos de 3 a 6 meses. Supongamos que 10.000 euros.

Ahora debemos ver qué cantidad de nuestros ingresos mensuales vamos a destinar al ahorro para completar el fondo de emergencia. Si destinamos 300 euros mensuales necesitaríamos 33 meses o lo que es decir 2 años y nueve meses.

Transferencias automáticas

En el supuesto caso que ya tengamos todo preparado, es hora de ir depositando el dinero. Lo ideal sería abrir una nueva cuenta corriente justamente para este fin, sin gastos de mantenimiento ni comisiones. Haz transferencias programadas de forma automática para facilitar el proceso y así evitarte gastar ese dinero.

Lo mejor es hacerlo a principios de mes o en los días cercanos a cuando recibes la nómina. Este método se denomina pre-ahorro y te permite conocer desde el primer momento cuál será tu nuevo presupuesto para el mes.

Paciencia e inteligencia

Ahora solo toca esperar. Si seguimos nuestro ejemplo de los 10.000 euros demorarías un poco en tener listo tu colchón de emergencia. Vale mucho la pena tener algo de paciencia. Así que trata de no caer en la tentación de gastar ese dinero y úsalo con cabeza.

¿Dónde guardar el fondo de emergencia?

No, no es buena idea guardar el dinero debajo del colchón. Entonces, ¿una cuenta bancaria? ¿un fondo de inversión? Sí y no. No existen opciones mejores que otras a la hora de depositar nuestro dinero y guardarlo, lo que sí debemos tener en cuenta son una serie de requisitos:

• No debe tener comisiones por mantenimiento, o sea, no debe costarte nada.
• Debe ser de muy fácil acceso para que puedas hacer frente a las emergencias.
• El banco o entidad financiera dónde lo guardes debe ser segura, y como consejo extra, debes separarlo de tus cuentas corrientes para evitar tentaciones.

Consideraciones finales

Los fondos para emergencias son una de las mejores herramientas para mantener una economía doméstica estable. Dedica  siempre una parte, por pequeña que sea, a este colchón financiero.

Y recuerda, en caso de que un imprevisto te sorprenda, ¡no dudes en pedir un préstamo rápido con Dinerio!