Fotovoltaicas sí, pero de manera respetuosa y planificada
Más de 10.000 personas asistieron a la manifestación celebrada en Valencia en contra de la implantación desmesurada de las plantas fotovoltaicas
La Asamblea Verde de Europa ha participado en la manifestación que se llevó a cabo este pasado sábado en Valencia contra la implantación abusiva de planta fotovoltaicas en nuestro entorno apoyando a la Coordinadora Valenciana para la implantación racional de las energías renovables.
Esta manifestación se realiza entendiendo que la importancia de luchar contra el cambio climático no puede derivar en un expolio del territorio y un abuso a la hora de proceder a la instalación de plantas fotovoltaicas.
Junto a colectivos como la Agrupación Ecologista Salvatierra de Villena, Ecologistas en Acción, plataformas vecinales y otros grupos políticos, hemos mostrado nuestra repulsa a que algo que debiera ser una lucha contundente contra el cambio climático se convierta en un elemento de especulación y deterioro medioambiental.
A la par del trabajo técnico, legal y administrativo coherente que los concejales y concejalas verdes han realizado ante las propuestas de tramitación de las instalaciones fotovoltaicas, unimos la voz de protesta a la de tantos grupos afectados. Esto se ha ejemplificado en reivindicativas pancartas que llaman la atención señalando cómo territorios muchas veces olvidados son ahora agredidos por esta “fiebre solar” especulativa y poco planificada. 2300 hectáreas en Villena, 730 hectáreas en Biar, 280 hectáreas en Salinas, son muestra de ello.
La Asamblea Verde critica la premura y poca planificación tanto del gobierno central como del autonómico. Si se tuvieran en cuenta los puntos de vertido y las zonas degradadas ambientalmente podría hacerse una planificación global que no atentara a espacios de especial protección ecológica de especial valor agrícola o paisajístico. Por ello se protesta ante la evidencia de la falta de planificación que hace que, de seguir así, sólo en el Alto Vinalopó se pretende instalar 2000 MW, el 33% de los 6000 que tiene como objetivo la Generalitat Valenciana.
La transición energética debe ser justa y ecológica, no una repetición de las burbujas especulativas que tanta degradación y pobreza han producido.