Francisco Martínez Catalán dona una obra de gran formato a Villena
Valorada en 3.000 euros, es la obra de mayor tamaño de la exposición “El verso mudo del óxido”
El arquitecto y artista villenense Francisco Martínez Catalán ha donado una de sus obras al patrimonio cultural de la ciudad. Se trata de “S. T. III”, el cuadro de mayor formato que formó parte de su exposición “El verso mudo del óxido”, que se pudo visitar en la Casa de la Cultura entre mayo y junio.
Se trata de un cuadro realizado con técnica mixta, con madera, plástico, pintura y metal, de 165 por 170 centímetros, y que está valorado en 3.000 euros. Fue la pieza de mayor tamaño de una colección de 28 obras que Martínez Catalán ha desarrollado como hobbie durante los últimos 16 años.
El propio artista y la edil de Cultura, Victoria Hernández, firmaban hoy los documentos por los que la obra pasa a ser de titularidad municipal, engrosando los fondos de la Casa de la Cultura, que alcanzan ya 160 obras catalogadas. La concejal agradecía el gesto del autor y subrayaba la obligación que adquiere el ayuntamiento de “conservar, mantener y exponer la obra a todos los ciudadanos, porque forma parte del patrimonio de todos”. Por el momento, podrá contemplarse en la Casa de la Cultura, y en un futuro acabará decorando cualquiera de las instalaciones municipales.
Peye Ayelo, director de la Casa de la Cultura, destacaba la coherencia de la obra con el resto de la exposición, definiéndola como “poesía visual y una metáfora del paso del tiempo y el avance del óxido”. Por su parte, Francisco Martínez Catalán agradecía “la atención del ayuntamiento y la Casa de la Cultura por permitirme exponer mi obra” y señalaba que “es una donación que hago muy a gusto y orgulloso por que pueda estar a la vista de todos los vecinos interesados”.
Arquitecto de profesión, Martínez Catalán ha tocado otras disciplinas, como el dibujo, el diseño gráfico y la fotografía, de la que ya hizo una exposición en la Casa de la Cultura en su día. De hecho, sus fotos de la Casa de la Cultura justo antes de su apertura, hace ahora 30 años, son las que ilustran y separan las distintas secciones de la Revista Villena 2018, presentada anoche.
