Indignación entre los funcionarios municipales por la arbitrariedad del alcalde al conceder el Complemento de Productividad
El pasado 23 de octubre, el alcalde, Francisco Javier Esquembre, firmaba un decreto ordenando el pago de un complemento de productividad valorado en 32.273,20 euros que, en cantidades variables entre 167 y 750 euros por persona, incrementaba en dicho mes la nómina de 94 trabajadores municipales.
Tal decisión, que tiene por objeto valorar el especial rendimiento, las tareas extraordinarias, el interés y la iniciativa, ha generado un enorme malestar en el resto de trabajadores municipales, hasta el punto de que se están presentando escritos de queja a título personal 27 se han presentado ya, nos aseguran, aunque hemos podido contrastar hasta 24 en el Registro de Entrada municipal. En ellos, los trabajadores cuestionan por qué a unos trabajadores sí y a otros no, y cuáles son los motivos que han llevado al alcalde a premiar a unos departamentos en concreto por encima de otros, e incluso a trabajadores del mismo departamento y que realizan el mismo trabajo frente a sus propios compañeros.
Legal, pero injusto
Los pagos se han realizado en cumplimiento del Reglamento de Productividad aprobado por el ayuntamiento en enero de 2013, por lo que las fuentes consultadas por EPdV asumen que la decisión del alcalde es legal. No obstante, señalan que dicho reglamento, recién aprobado, debe desarrollarse mejor, para lo que hay propuestas sobre la mesa como el que ya funciona, a la perfección, en Aspe.
Con el texto actual, subrayan nuestras fuentes, el alcalde puede otorgar los complementos a su criterio, lo cual no es justo, porque acaban existiendo discriminaciones inexplicables. El alcalde reconoce que se ha equivocado, nos aseguran, y por eso ha indicado que en próximas ocasiones se retribuirá a otros funcionarios, pero ésta no es una forma justa de proceder, y por eso muchos trabajadores quieren dejar constancia a título personal de su malestar con el alcalde, concluyen.