La alcaldesa aparta de la Junta de Gobierno a los concejales campistas Juan Carlos Pedrosa, Adela Serra y Juan Richart
Acompañada por el portavoz del Partido Popular, José Joaquín Valiente, la alcaldesa de Villena, Celia Lledó, ha comparecido ante los medios de comunicación para explicar los motivos que le han llevado a retirar mediante la firma de un decreto a Juan Carlos Pedrosa, Juan Richart y Adela Serra de la Junta de Gobierno Local. Como consecuencia de este cese, Adela Serra ha perdido además su cargo de tercer teniente de alcalde del Ayuntamiento.
Al parecer las discrepancias que en los últimos dos meses mantienen las dos facciones del equipo de gobierno por su afinidad a Camps o Ripoll han tenido que ver en esta decisión, pero según la edil el hecho determinante fue que abandonaran la última Junta de Gobierno y no quisieran votar a favor de proyectos (incluidos en el Fondo Estatal de Inversión) de sus propios compañeros de partido. Para Lledó no es de recibo que estos tres ediles se marcharan de la reunión para no aprobar estos proyectos y cree que a lo largo de estos últimos dos meses se ha producido demasiadas acciones que no son concebibles en política.
Pese a ser apartados de la Junta de Gobierno la primera autoridad local afirmaba que sigue confiando en Richart, Serra y Pedrosa, por lo que seguirán al frente de sus concejalías. Según ella no tiene otra cosa que echarles en cara, pues considera que están trabajando muy bien y espera que así lo sigan haciendo. Lledó cree que la situación está controlada y no teme ninguna represalia por parte de los ediles cesados; no obstante, si realizaran otra acción de este tipo tendríamos que valorar qué decisiones se adoptan.
Asegurar la gobernabilidad
En cuanto a la división interna del PP, la alcaldesa quiere que en lugar de hablar de G-8 y G-4, se hable de G-12 y se integren los diferentes puntos de vista que pueda haber dentro del equipo de gobierno. Y aunque esta decisión que según ella ha sido debatida a nivel interno parecer ser un castigo contra los ediles rebeldes del G-8, Lledó afirmaba que es un acto de responsabilidad para asegurar la gobernabilidad del municipio". En este sentido señalaba que es importantísimo que todos los proyectos se aprueben en plazo y con eficacia y para ello no dudará en tomar las medidas que sean necesarias.
Dar más participación a la oposición
Respecto a los tres puestos que quedan vacantes en la Junta de Gobierno ha indicado que para suplirlos están barajando integrar a otros concejales del equipo de gobierno, o incluso de la oposición. Por ello ya han hablado con algún edil de la oposición, pues les gustaría que participaran más en la gestión municipal. En este momento, más que nunca, quiero darles toda la información porque ahora no tenemos nada que ocultar y total transparencia, para que la oposición fiscalice todos nuestros actos, añadía. La edil reconocía que por el momento sólo han hablado con el PSOE, aunque dejaba claro que no quiere excluir a Los Verdes. Por el momento las decisiones de la Junta de Gobierno quedan en manos de la propia alcaldesa, Celia Lledó, los ediles afines José Joaquín Valiente, Jesús Martínez y María José Hernández, y José Joaquín Oliva, único integrante del llamado G-8 que no abandonó la Junta de Gobierno el lunes.
Intentos de mediación
Preguntada por la comida que compartió con la diputada autonómica del PP Mª José García Herrero y el empresario Andrés Martínez Espinosa para intentar reconducir la situación, Lledó explicaba que se han agotado todas las vías de diálogo posibles y que también esta última ha fallado. Asimismo aclaraba que fue ella, y no el presidente autonómico del PP Francisco Camps, quien pidió a Martínez que ejerciera como mediador entre las dos facciones populares para llegar a una solución.