Sociedad

La comunidad islámica de Villena reitera su respeto por nuestras Fiestas y el uso de la efigie de Mahoma

Aunque debido a cuestiones personales le ha sido imposible difundir personalmente su opinión, el presidente de la Comunidad Islámica de Villena, Mohamed Khaddaji, ha querido transmitir –a través de la concejalía de Inmigración– un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía de Villena ante las declaraciones del presidente de la Federación Islámica Española (e Imán de Málaga) en relación a las Fiestas de Moros y Cristianos, de las que la semana pasada exigió su supresión al considerarlas “antidemocráticas”.
Por boca del responsable de inmigración en el ayuntamiento, Juan Ángel Conca, se ha insistido, en primer lugar, en que las declaraciones del Imán de Málaga fueron realizadas a “título personal”, es decir, sin acuerdo previo de los responsables de la Federación. Del mismo modo, se ha recordado que tales declaraciones responden al revuelo mediático suscitado por numerosos medios de comunicación nacionales, ya que en ningún momento ha existido queja o comentario alguno por parte de las comunidades musulmanas de ciudades como Villena, Biar, Benejama o Bocairente. Por ello, se tiene la impresión de que parten de alguien “que no debe conocer mucho nuestras fiestas” y la total certeza de que entre la comunidad musulmana de nuestro entorno no hay polémica alguna al respecto.

Asimismo, se ha recordado que fue el propio Mohamed Khaddaji quien por iniciativa propia solicitó a la concejalía de Inmigración que transmitiera un mensaje de rechazo y condena ante los actos violentos sucedidos hace unos meses a causa de la polémica surgida por la publicación de unas caricaturas del profeta en un diario danés. Entonces, tal y como señalamos en nuestra última edición, Khaddaji también quiso hablar sobre el uso de la efigie de Mahoma en nuestras Fiestas, señalando que “los musulmanes de Villena entendemos perfectamente que se trata de una tradición en absoluto ofensiva y que festeja la historia de este pueblo. Para mí no es la representación del profeta, es simplemente una expresión festiva a la que, dicho sea de paso, se le trata bien, y que por lo tanto no se refiere a mi fe y por la que no me siento aludido”. No obstante, también se apuesta por un aumento del conocimiento mutuo –por ejemplo, conocer que la religión islámica no permite la representación de su profeta– y respeto ante ciertos episodios –la voladura con petardos de la cabeza de la imagen, tirarla a la fuente, etc.–. En cualquier caso, es la propia Iglesia Católica, desde el Concilio Vaticano II, la que ha exigido respeto hacia todas las confesiones, tal y como se ha recordado en Villena en diversas ocasiones (la última, con motivo de la celebración de Entrefiestas), hasta el punto de que han sido sacerdotes católicos los primeros en plantear una reflexión en torno a la utilización de la figura.

Trabajar por la integración
Por todo ello, se quiere insistir desde la concejalía en que la opinión de los colectivos musulmanes de nuestra comarca se mantiene y que ninguna comunidad islámica de nuestro entorno ha hecho o dicho nada en este sentido. De hecho, el comportamiento del colectivo musulmán de Villena es calificado como “ejemplar” desde la concejalía, que también señala que nuestros nuevos vecinos se sienten respetados por los ciudadanos de Villena, un respeto que es recíproco y que ellos mismos trasladan día a día hacia la sociedad villenense.

Como reflexión final, y tras reiterar que “en Villena no hay polémica alguna en torno a la figura de Mahoma”, desde la concejalía se apuesta por aprovechar esta oportunidad para “dar a conocer lo bueno de nuestras fiestas, que son muy populares y han sido capaces de integrar a gente de todos los estratos económicos y de ambos sexos, por lo que no tardaremos en ver a nuestros nuevos vecinos desfilando y tomando parte en ellas como cualquier ciudadano de Villena”.

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