Durante la mañana de hoy se ha procedido, en el barrio del Rabal, al levantamiento del cadáver de un joven toxicómano de 25 años de edad, que al parecer ha sido encontrado esta misma mañana por un niño pequeño al adentrarse en una casa abandonada, donde la víctima se había instalado hace al menos cuatro días.
Según las primeras informaciones que han trascendido, junto al cadáver del joven, que podía llevar varios días muerto, había multitud de pastillas y medicamentos. Hasta que no se practique la autopsia no se podrán conocer fielmente las causas del fallecimiento, aunque algunos de los vecinos presentes en el lugar de los hechos han señalado a EPdV que el finado era un consumidor habitual de heroína.
El levantamiento del cadáver ha sido aparatoso, siendo necesario hacerlo descender desde un primer piso por una ventana, motivo por el cual se ha requerido la presencia de un destacamento del cuerpo de bomberos. Asimismo, numerosos Guardias Civiles controlaban la operación e intentaban tranquilizar a los familiares y amigos del fallecido, envueltos en llantos y gritos de lamento por el triste suceso.
Otra casa ocupada
Familiares y vecinos del fallecido criticaban la facilidad con la que algunos toxicómanos y vagabundos se instalan en casas abandonadas del barrio del Rabal como en el caso de hoy, solicitando al ayuntamiento que se derrumben estos inmuebles o, cuando menos, se impida el acceso a los mismos mediante tapiados y se vigilen regularmente para evitar que sean ocupados por drogadictos e indigentes.
