La empresa villenense Q Robótica, en las obras de la nueva autopista marítimo-ferroviaria del Puerto de Valencia

El alcalde, Fulgencio Cerdán, y el edil de Urbanismo, Francisco Iniesta, han acudido hoy a la presentación de la autopista marítimo-ferroviaria que se ha implementado en el Puerto de Valencia, cuyo proyecto de automatización ha sido gracias a la participación directa de la empresa de Villena Q Robótica.

El acto, que ha estado presidido por el Ministro de Transportes, Óscar Puente, y el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha permitido dar a conocer este proyecto a través del cual será posible cargar en cada viaje hasta 40 semiremolques con sus 20 vagones, lo que supone liberar del tráfico rodado por carretera un importante número de camiones y evitar la emisión de CO² y otros gases contaminantes a la atmósfera.

El alcalde de Villena ha puesto en valor la participación de una empresa local que es la protagonista de esta infraestructura que “cambiará sustancialmente la forma y manera del tráfico de mercancías entre el Puerto de Valencia y el interior de la provincia. La capacidad técnica de Q Robótica es un ejemplo más del potencial empresarial de Villena, la diversificación de nuestra economía y el desarrollo de nuevas empresas de base tecnológica con alto nivel de solvencia y competitividad técnica”.

Para Cerdán, este tipo de empresas asegura que “desde el Polígono de El Rubial también se puede competir en procesos altamente técnicos y tecnológicos, y que nuestro ecosistema empresarial está más que preparado para dar cobertura a un Nodo Logístico, como venimos demandando desde hace décadas”.

Por su parte, Francisco Iniesta, ha destacado que la participación de esta empresa de Villena “también deja su seño en un nuevo modelo de transporte y logístico, donde el ferrocarril ocupa el espacio que necesitamos en las políticas de descarbonización de la economía y el transporte”. Desde su punto de vista, “necesitamos apostar por sistemas de transportes colectivos, tanto para mercancías como para viajeros. Este es un modelo que se puede aplicar – en cierta medida – a otras iniciativas que sustituyan al transporte convencional por carretera que tiene severos efectos medioambientales y altos costes para las empresas”.