La Generalitat incumple parte de sus compromisos con Villena por asumir las basuras de la Vega Baja
Tras la última reunión del Consorcio Zonal de Basuras, el alcalde convocó a la Comisión de seguimiento creada en el ayuntamiento, a instancias del PSOE, para valorar el cumplimiento, o no, de los compromisos adquiridos por la Generalitat con Villena tras asumir, durante un periodo de seis meses, la llegada de basuras de la zona de la Vega Baja.
A dicha reunión asistió, invitado por el ayuntamiento, el director general de Vaersa, y se pusieron sobre la mesa muchos datos demandados por el consistorio. En su día se especificó que no llegaran más basuras de las que la planta pueda tratar, fijando el Consorcio zonal controlado en su día por una mayoría de ayuntamientos gestionados por el PP, matizaba Esquembre un máximo de 80 toneladas diarias. No obstante, finalmente estuvieron llegando entre 20 y 30 toneladas, y últimamente la cifra ronda las 50, ya que Callosa de Segura también está enviando sus residuos a Villena, decía Esquembre, añadiendo que no obstante, y aún estando dentro de las cifras autorizadas, han hecho que se intensifiquen los episodios de malos olores.
Por otro lado, se confirmó que los compromisos no están siendo cumplidos, o al menos no en su totalidad. De entrada, el plazo transitorio de 6 meses concluye a comienzos de marzo, y como quiera que la Vega Baja sigue sin resolver su problema, todo parece indicar que Villena seguirá recibiendo basuras de fuera. En este sentido, Esquembre señalaba que, como presidente del Consorcio, se opondrá a ello y pedirá que otros lugares sean solidarios como lo ha sido Villena hasta ahora. Así, y pese a que una sentencia judicial impedía a Villena la posibilidad de negarse a recibir basuras de fuera al no tener competencias sobre esta cuestión, Esquembre apuntaba que el Consorcio de basuras sí las tiene, por lo que esperamos poder redigirir, al menos en parte, el flujo de residuos hacia otras plantas de la comunidad.
Otro compromiso, el de la contratación de personal, directamente no se ha cumplido, algo que el director de Vaersa achacaba a que la Generalitat no tiene aprobada la masa salarial para dicha empresa pública y esperaba que esté resuelto en un mes. No obstante, en un mes concluirá el plazo de 6 meses, y si finalmente dejan de llegar residuos de fuera a Villena, se habrá incumplido el compromiso de la creación de puestos de trabajo con personal local.
El cumplimiento del resto de compromisos, por último, tampoco se ha desarrollado plenamente. Los sensores y olfatómetros para detectar picos de olor y el origen de los mismos están instalándose ahora, decía el alcalde, pero aunque debía pagarlos Vaersa, de momento va a asumir este gasto, cuantificado en unos 20.000 euros, el ayuntamiento, aunque luego reclamaremos a Vaersa ese dinero. Por último, concluía Esquembre, se sigue avanzando en el aumento del control de las entradas de residuos, con un control on-line vía web de la entrada de camiones en la planta y el pesaje de los mismos, aunque ese seguimiento tampoco está implementado al 100% al día de hoy.