La Generalitat sólo ha puesto en marcha uno de los 10 vertederos previstos en 1997
Siete de las 17 zonas en las que la Generalitat ha dividido la gestión de los residuos en la Comunidad Valenciana carecen en la actualidad de vertedero propio y el resto, a excepción de la zona XV que vierte en El Campello, está utilizando instalaciones construidas con anterioridad al Plan Integral de Residuos que diseñó el Partido Popular tras acceder al poder. De las diez instalaciones de vertido que se diseñaron a raíz del Plan Integral de Residuos de 1997 tan solo está operativa la de El Campello, que da servicio a la Marina Alta y Baixa. Todo este esquema podría cambiar con la incorporación de las cuatro incineradoras que Medio Ambiente incluirá en el futuro Plan Integral de Residuos, actualmente en tramitación.
Además, una de las zonas más "sensibles" por volumen de vertidos y por la población atendida, la que agrupa a Valencia capital y a amplias zonas de l'Horta, vive al día pendiente de un posible cierre judicial del vertedero de Dos Aguas, sin la ampliación prevista en este mismo municipio y con un enorme retraso en la construcción de las plantas de tratamiento de Hornillos (Aldaia-Quart) y Manises.
Según balance oficial de situación realizado hace apenas unos meses por la propia Conselleria de Medio Ambiente, Agua y Urbanismo, la mayoría de las zonas de gestión tienen aparentemente encauzado el problema de los residuos. Sin embargo, la realidad es muy diferente y periódicamente aparecen tensiones que evidencian la precariedad del modelo y el enorme retraso que acumulan las actuaciones diseñadas por la conselleria.
Plantas pendientes
De norte a sur, la Conselleria de Medio Ambiente tiene pendiente la construcción de un vertedero, asociado a una planta de "valorización", en Cervera del Maestre, y proyecta otros dos en Vall d' Uixó y Algimia de Alfara.
En el interior de Valencia, los municipios están llevando la basura a Villena por falta de instalaciones mientras esperan la construcción de un vertedero en Caudete de las Fuentes. En Dos Aguas, la población que soporta las basuras del área metropolitana de Valencia, hay proyectos para dos vertederos más mientras que en Llíria se tramita un centro de valorización. No hay una solución, ni siquiera en fase de diseño, para la Costera, la Canal de Navarrés, la Safor, la Vall d'Albaida y Ayora-Cofrentes y se redacta el proyecto de vertedero en Tous para que viertan en sus instalaciones las dos Riberas.
En Alicante la situación cambia radicalmente respecto los problemas acumulados en Valencia y Castelló gracias a la existencia de varios vertederos operativos antes de la entrada en vigor de los planes zonales. Es el caso del vertedero de Villena, que recibe basuras del Alto Vinalopó y parte del Medio Vinalopó y l'Alcoià; y el de Xixona, con residuos de la mayor parte de l'Alcoià, el Comtat y algunas áreas de l'Alacantí.
La Marina Alta y Marina Baixa lograron un acuerdo con El Campello, donde hay planta de valorización y vertedero de rechazos. Alicante vierte desde hace años en Fontcalent, donde dispone de vertedero y planta de tratamiento que está pendiente de ampliación, mientras que Elche y su entorno disponen de planta propia previa al PIR.
Finalmente, la Vega Baja carece de instalaciones oficiales aunque existe un macrovertedero propiedad del empresario Ángel Fenoll donde llegan a diario cientos de toneladas de basura de toda la Comunidad.
Fuente: Diario Información
Autor: José Sierra
