La lluvia caída en la noche de ayer volvió a crear problemas en el casco urbano
Ante la tromba de agua caída en la noche del domingo, la ciudad de Villena ha vuelto a sufrir la dolencia que desde hace años nos acompaña. Numerosas cocheras y edificios han vuelto a ser invadidos por el agua creando, en algunas ocasiones, graves problemas para los vecinos que tienen que soportar que el agua se eleve por encima de las aceras y entre en sus zaguanes, cocheras o domicilios particulares.
Pero el daño más grave causado en esta ocasión se ha situado en la calle Virgen de Guadalupe, situada en paralelo a la Rambla Conejo, de tan triste recuerdo por las inundaciones del mes de septiembre de 2007. En aquella ocasión, el gran caudal de agua caído superó la capacidad de desagüe de la rambla e hizo que el asfalto se levantase, sirviendo este agujero de aliviadero para tal avalancha de agua, lo que inundó todas las calles adyacentes.
El problema creado en esta ocasión se debe, según las apreciaciones de los funcionarios que están allí trabajando y todavía sin confirmar por parte de los técnicos municipales, a un posible escape de las aguas pluviales del alcantarillado situado en aquel tramo. Posiblemente este escape ha provocado que el asfalto se haya hundido, creando gran alarma entre los vecinos de la zona, que nos preguntaban si se podrían ver afectados los edificios colindantes por esta fuga de agua.
De todas maneras hasta que no se levante en su totalidad el tramo afectado no se podrán valorar tanto los daños como el motivo de este socavón. Mientras tanto esperamos la valoración del concejal de Obras, Juan Richart, que rápidamente se puso en contacto con la brigada de Obras, por lo que a primeras horas de la mañana se estaba subsanando el problema.
Al parecer además se han visto afectados diversos inmuebles municipales. Tal sería el caso del Centro de Salud nº 1 situado en la calle San Francisco, en el que también entró agua de la lluvia. Asimismo, tenemos constancia de que el edificio de La Tercia ha vuelto a sufrir una inundación a causa de las goteras existentes en el inmueble.
