La oposición no logra el apoyo del PP para reclamar que Educación para la Ciudadanía se imparta en castellano

En el pleno municipal de junio –cuyo inicio se adelantó a las 18.30 horas por coincidir con la semifinal de la Eurocopa entre España y Rusia– se debatió la moción del Grupo Municipal Verde contraria a que la asignatura de Educación para la Ciudadanía (EpC) se estudie en inglés en la Comunidad Valenciana. El PSOE apoyó el texto de Los Verdes, no así el Partido Popular, que con sus votos en contra desestimó solicitar a la Generalitat (también gobernada por el PP) que la asignatura se imparta en castellano o valenciano.
La portavoz del Grupo Verde defendía la moción indicando que la forma en que se va a implantar EpC es ilegal e inadmisible, pues además de permitir la objeción de una asignatura obligatoria y querer aplicarla en una lengua no oficial, “atenta contra la libertar de cátedra y puede tener efectos negativos en el alumnado que elija la opción B (no cursarla, sino realizar trabajos trimestrales)”. Cate Hernández insistía en que la aplicación de esta orden provocará graves dificultades y conflictos a los alumnos, a los padres, al profesorado y a los centros por la imposibilidad práctica de organización y por la confusión que provocará la cobertura que se pretende dar a la “objeción” a los contenidos.

Por su parte el portavoz del Grupo Socialista, Carlos Beltrán, recordaba que la ley para la implantación de Educación para la Ciudadanía es estatal y debe cumplirse, por lo que no entendía que el PP de la Comunidad Valenciana se opusiera al Gobierno de España en lugar de dedicarse a responder a las necesidades que en materia de educación existen en esta región. Para él resultaba absurdo que el PP plantease la objeción de conciencia ante esta asignatura cuando es obligatoria y en otras comunidades gobernadas por los populares sí se ha aceptado como la plantea el Ministerio. Beltrán se preguntaba si el PP tenía miedo a esta asignatura y se mostraba convencido de que finalmente la Conselleria dará marcha atrás y EpC no se impartirá en inglés.

El concejal de Educación, José Joaquín Oliva, respondía que la Conselleria era competente para impartir EpC en lengua inglesa, algo que estaba argumentado en el Estatuto de Autonomía de la Comunidad Valenciana, por lo que no se incumplía la ley. El edil indicaba, asimismo, que los populares no querían que a sus hijos se les enseñaran contenidos que favorecen un adoctrinamiento y atacan ciertos valores tradicionales y a la religión católica, entre otras cosas, para lo cual mostraba varias viñetas extraídas de libros de texto de esta asignatura.

Tanto Los Verdes como el PSOE le acusaban de utilizar de ofrecer una visión sesgada de esa asignatura, al mostrar los dibujos sin enseñar el contexto que los rodea. Sus portavoces recordaban que la Generalitat tiene la opción de adecuar el currículum de contenidos mínimos de la asignatura y que si en un futuro gobernaba a nivel nacional podría variarla o eliminarla si así lo creía conveniente. Por último insistían en que EpC buscaba transmitir los valores de la Constitución Española, los derechos humanos, la igualdad de género y que con su boicot el PP demostraba su desinterés en que los estudiantes aprendan valores democráticos y de convivencia.