La piscina cubierta arroja un déficit de 577.000 euros en 2017. El ayuntamiento pagará unos 340.000
El alcalde, Francisco Javier Esquembre, ha informado sobre el resultado económico del último ejercicio de la piscina cubierta municipal, que ha arrojado en déficit de 577.000 euros. No obstante el ayuntamiento, avalado por una sentencia judicial, pagará del orden de 340.000 para mantener el equilibrio económico de la concesión.
Esquembre destacaba la importancia de dicha sentencia, que viene a dar la razón al ayuntamiento en el cálculo que año tras año ha efectuado para pagar a la empresa concesionaria una cantidad inferior a la reclamada por la empresa por el déficit que las instalaciones arrojan año tras año. De haber sido al contrario, apuntaba el alcalde, nos encontraríamos ante un grave problema, pues el ayuntamiento no podría asumir un coste tan alto".
Las cuentas del último ejercicio, que va de octubre de 2016 a octubre de 2017, arrojan unos ingresos de 365.000 euros y unos gastos totales de 866.000 euros entre gasto corriente (590.126) y amortizaciones (276.246), lo que da como resultado un déficit de 577.000. No obstante, y ya con visto bueno judicial a sus cálculos, el ayuntamiento pagará unos 340.000 euros para mantener el equilibrio económico de la concesión. Si a ese dinero le quitamos el importe de las amortizaciones, vemos que el servicio está logrando un mejor equilibro, aumentando sus ingresos y conteniendo sus gastos, y aunque hay cuestiones a mejorar, pensamos que seguimos en el buen camino para hacer que la piscina no sea muy costosa para los ciudadanos, apuntaba Esquembre.
Al margen de las cifras, el balance demuestra que el centro deportivo cuenta con una importante demanda, pues han sido 14.622 los usos realizados de las instalaciones durante el último ejercicio, con más de 700 abonados, 500 participantes en cursos cada mes, 2.231 usos libres, 1.154 usuarios de las pistas de pádel y 375 inscritos en la Escuela de Verano. La demanda existente es real, concluía el alcalde, y se está dando un servicio de primera calidad. Quizá si se hubiera planteado un proyecto menos ambicioso y más barato estaríamos hablando de un uso similar a un coste mucho menor para los ciudadanos.
