Coincidiendo con la celebración de su Ecuador Infantil, la comparsa de Moros Nuevos abrió este fin de semana sus puertas a la Asociación de Coleccionistas de Pinballs y Máquinas Recreativas, que ha transformado las dependencias de la sede social de la comparsa en un auténtico salón recreativo, haciéndonos viajar en el tiempo aunque fuera por unas horas
Según nos relataba José Tarruella, uno de los organizadores, finalmente fueron 18 los pinballs instalados y 50 las personas inscritas en la concentración la segunda de estas características, tras una primera edición celebrada en Biar, algunas de ellas venidas de lugares tan distintos (y en algunos casos tan distantes) como Totana, San Juan, Biar, Valencia, Elche, Caudete y hasta Madrid.
Según nos relataron desde la organización, este evento es más una quedada que otra cosa, porque al final siempre acudimos los mismos, pues casi todos somos miembros de la Asociación de Coleccionistas de Máquinas Recreativas de la Comunidad Valenciana. Actos como el de este fin de semana son un motivo de encuentro entre aficionados y coleccionistas, y para darle un poco más de emoción, pues se hace un pequeño campeonato en el que vamos probando todas las máquinas.
Auténticas piezas de museo
Además del desarrollo del campeonato, en el que únicamente participaban los jugadores previamente inscritos, todos aquellos curiosos que pasaron por los salones de los Moros Nuevos, grandes y pequeños, pudieron jugarse alguna partida
y además, gratis, ya que así están preparadas estas máquinas, procedentes en este caso de las colecciones particulares de tres coleccionistas de Villena, que a su pasión por el juego del pinball unen su habilidad técnica y gusto estético para recuperar máquinas viejas o abandonadas especialmente aquellas que marcaron una época, de hecho, el sábado pudimos ver 5 ó 6 incluidas en el top ten mundial según los aficionados ya sea restaurándolas en su aspecto original o añadiendo diseños y adaptaciones de cosecha propia, lo que convierte a estas máquinas en auténticas piezas únicas y, en consecuencia, en objetos mucho más valiosos aún.
