Editorial

Las fiestas de un barrio, el orgullo de una ciudad

El barrio del Rabal –y Villena entera, porque la celebración ha trascendido a sus orígenes y cada vez son más los grupos de amigos y colectivos artísticos o sociales de toda la ciudad que toman parte– se dispone a celebrar una nueva edición, y ya van dieciséis, de sus Fiestas del Medievo, que por el camino, y a base de buen hacer y un crecimiento sostenido y sostenible, se han dejado hasta el nombre, transformándose de “mercado medieval” en “Fiestas del Medievo”, concepto que engloba y define mejor lo que hace tiempo que dejó de ser un simple mercadillo más para convertirse, por derecho propio, en la segunda festividad de nuestra ciudad, solo superada en participación por las fiestas de Moros y Cristianos de septiembre.
A nada que analicemos la trayectoria que ha seguido este proyecto con algo de distanciamiento y perspectiva, nos daremos cuenta de lo extremadamente difícil que resulta conseguir lo que han conseguido los vecinos del Rabal, que unidos en torno a su asociación han sabido dar vida y continuidad a un evento cuyas cifras han pasado a ser ya apabullantes, tanto en visitantes como en participación e implicación ciudadana, tanto en repercusión y publicidad mediática para nuestra ciudad como en retorno económico de esa promoción en forma de visitantes o el posicionamiento destacado de Villena en las rutas proyectadas por agencias y mayoristas turísticos.

En definitiva, un rotundo éxito organizativo, de público y promocional que obliga a agotar los adjetivos para felicitar a la Asociación de Vecinos del Rabal y a todas las personas, colectivos y empresas que colaboran con ellos en su objetivo, que no es otro –no lo olvidemos nunca– que la recuperación urbanística y social de un barrio que, como sus mismos vecinos y vecinas no se cansan de repetir, es de todos, como a todos beneficia el éxito de unas Fiestas del Medievo que ojalá mantengan su trayectoria y espíritu para beneficio de toda Villena.

Disfrutemos de las Fiestas del Medievo, por supuesto. Pero sobre todo, ayudemos a los vecinos en su tarea, colaboremos con ellos, y nos estaremos ayudando todos, no lo duden.

(Votos: 0 Promedio: 0)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba