Las Fiestas de Villena y algo más
Hay tres “patas” que sustentan las Fiestas de Villena y las tres son importantes
Lanzo aquí la siguiente reflexión relacionada con la celebración de las Fiestas de Moros y Cristianos en Villena, una tradición que se acerca a los dos siglos de antigüedad lo cual dice mucho, y bien, de ellas.
Estas Fiestas tienen alta raigambre en nuestra ciudad por varios motivos. El primero se refiere al tema principal: el peso católico en la historia de España promueve a que se las relacione con la declaración de la Virgen de las Virtudes como Patrona de Villena y la realización de una serie de actos -religiosos y seculares- en su honor cuando su imagen llega a la ciudad en septiembre. La Virgen, tanto para quienes tienen Fe como no en ella, representa la “villeneidad” de quienes habitan en la ciudad y participar -activa o pasivamente- en las Fiestas es la manera de mostrar que viven en Villena.
El segundo factor es la interiorización de estas Fiestas en la ciudadanía. Desde edad muy temprana, ésta ha estado escuchando música festera, visitando las sedes oficiales de sus respectivas comparsas, comprobando in situ cómo se realizan los actos del Ecuador festero, preparando los trajes para cuando llegara septiembre, etc. En otras palabras, en ningún momento del año su mente emocional se olvida de las Fiestas sino todo lo contrario.
Finalmente, tenemos las instituciones; me refiero tanto a las Juntas Directivas de las comparsas como a la Junta Central de Fiestas y el propio Ayuntamiento, que se encargan de que todo esté preparado para cuando llegue el momento deseado -cuotas abonadas, habitaciones para que descansen los músicos, luces, asientos y demás necesarias actuaciones-.
En definitiva, hay tres patas que sustentan las Fiestas de Villena y las tres son importantes; bien coordinadas y equilibradas, el futuro festero está garantizado y así debe ser. Es conocida la máxima que dice: “no se puede amar lo que no se conoce, ni defender lo que no se ama”. En este sentido, las Fiestas villeneras son conocidas y, por consiguiente, amadas.
En cuanto a sistema político, la democracia también debe tener sus tres patas fundamentales. El primer motivo de los tres es crear un espacio de convivencia en España en el que los derechos humanos sean la base sobre la que construir dicha convivencia -algo que no existía en la dictadura del liberticida Franco-.
Sobre los otros dos pilares básicos -la interiorización democrática de la ciudadanía y el funcionamiento de las instituciones- sinceramente, tengo mis dudas y eso me preocupa sobremanera, sobre todo porque es sabido que la alternativa a un sistema democrático siempre es la tiranía, esto es, la imposición -intolerante por su propia naturaleza- de una minoría social sobre el resto que empeorará las condiciones de vida de éste y, mucho peor, le hará perder su dignidad.
Si queremos evitar este desastre humano, fomentemos que la ciudadanía española sepa que lo es, lo que ello significa y lo que ha costado alcanzar este ámbito jurídico -hay mucha sangre derramada si echamos la vista hacia atrás- y exijamos a nuestras instituciones que realmente sean democráticas. La Constitución de 1978 dejó el horizonte democrático claramente marcado. Releerla siempre es un acto muy sano. Lo recomiendo.
Por: Fernando Ríos Soler
Lo del funcionamiento de las instituciones…. No se yo….
Sólo hay que ver lo bien que funciona la justicia