Lledó denuncia que AAP ha iniciado las obras del centro de primates sin tener licencia de apertura
La portavoz del PP ha criticado que la fundación holandesa AAP haya comenzado a construir en el paraje del Rincón del Moro (en Sierra Salinas) su centro de primates antes de tiempo. Según ella la culpa la tiene el equipo de gobierno, más concretamente el concejal de Medio Ambiente Antonio Pastor, porque a la fundación se le dio la licencia de obras condicionada a tener la licencia de apertura. Al no tener aún ésta última, se está contraviniendo la Declaración de Interés Comunitario (DIC) otorgada por la Conselleria de Territorio.
Concretamente, la DIC indicaba que antes de iniciar las construcciones del centro de primates Primadomus, la fundación tendría que obtener la licencia de apertura. Sin embargo, el Ayuntamiento de Villena ha concedido la licencia de obras, diciendo que al mismo tiempo se diera la licencia de apertura, pero no se ha dado, aseguraba. Lledó consideraba una paradoja que ya se haya iniciado el desmonte y desbroce de un paraje de tanto valor ecológico como el Rincón del Moro (erosionando el terreno y pudiendo talar los pinos que haga falta sin impedimentos), mientras Pastor aprovecha este domingo para organizar una repoblación de árboles en otros lugares. Para la concejala del Partido Popular esto es una incoherencia total y si existen unos condicionantes en la Declaración de Interés Comunitario dada a la fundación AAP, lo que tiene que hacer el consistorio es exigirlos.
Lo que no puede ser es que el ayuntamiento sea el primero que les diga que construyan, que no pasa nada aunque no cumplan con los requisitos mínimos de la DIC, decía Lledó. Por eso ha exigido que el consistorio paralice inmediatamente las obras, hasta que AAP no haya obtenido la licencia de apertura correspondiente.
Autorización de derribo
En relación con este tema, comentaba que en la DIC también se hablaba de que en el Rincón del Moro hay una construcción de más de 100 años de antigüedad y la fundación AAP se comprometía a rehabilitar ese edificio; no obstante, parece que es más rentable derribarlo. Así que presentaron el proyecto para su derribo en la Junta de Gobierno Local del 26 de febrero, algo que autorizó el equipo de gobierno con el voto en contra del PP. De manera que el tripartito vuelve a ser más tolerante con sus amigos, mientras que al resto de empresas o asociaciones que en Villena ejecutan obras sí se les controla exhaustivamente todo lo que hacen.