Los aventureros villeneros ya están en Hong Kong y se disponen a partir para Yokohama

Tras los sorprendentes acontecimientos de Bombay, detención momentánea incluida, los seis viajeros villenenses que perseveran en realizar la vuelta al mundo en 80 días siguiendo el itinerario de la novela de Julio Verne han concluido su periplo por la India en Calculta.
Allí, en la capital del estado de Bengala, han tenido una estancia más placentera, pudiendo disfrutar de varios días de asueto en los que han disfrutado de sus principales atractivos turísticos, destacando los templos de Dakshineswar Kali y Khaligat, el Victoria Memorial y, sobre todo, la casa de la orden de las Misioneras de la Caridad, centro neurálgico de la congregación creada por Teresa de Calcuta, y donde desde 1950 se hace una impagable labor de atención a los pobres, enfermos, huérfanos y moribundos. Reconocida su labor con el Premio Nobel de la Paz en 1970, los viajeros villenenses han podido conocer in situ el grandísimo trabajo que realizan las hermanas y la inmensa obra que, partiendo desde la nada, consiguió levantar la Madre Teresa.

Impresionados aún por esta visita, los seis villeneros tomaron un avión rumbo a Hong Kong, la antítesis de la India. Capital mundial de la arquitectura y uno de los mayores centros financieros mundiales, la antigua colonia británica es una megaciudad –aproximadamente 7 millones de habitantes, más una inmensa población flotante que acude a diario a trabajar– inundada de rascacielos (ninguna otra ciudad del mundo cuenta con tantos) y totalmente occidental, pese a que el idioma más corriente es el chino cantonés. En cualquier caso, la mayoría de la población habla inglés y los viajeros no han tenido problema para comunicarse.

Tras el periplo por la India, y las dificultades a la hora de disfrutar de una comida al agrado de los paladares españoles, Hong Kong se les ha abierto como una ciudad absolutamente cosmopolita donde encontrar de todo, así como volver a disfrutar de comodidades más difíciles de encontrar en Bombay o Calcuta.

Aprovechando un paseo, los viajeros se acercaron hasta la embajada española, a fin de preguntar si el episodio de la breve detención en Bombay podría dificultar de algún modo su viaje, y tras las pesquisas de la embajada quedó aclarado todo el asunto. Según les han relatado, Interpol había alertado a las autoridades tras el intento de comprar de unas pistolas en un mercado egipcio por parte de unos sujetos desconocidos. Casualmente, dos miembros de la expedición villenera compraron dos pistolas en un mercado de El Cairo –antiguas, inutilizadas y válidas únicamente como elemento ornamental–, pero al parecer fueron detectadas por el control de acceso en la India, y, procediendo ese vuelo de El Cairo, saltaron las alarmas. De ahí la detención, hasta que las autoridades indias comprobaron la identidad de los viajeros y el carácter de su “armamento”.

Solventada la duda, que no va a pasar de una gran anécdota que contar a su vuelta, los viajeros se disponen ya a viajar a Yokohama, Japón, última etapa en Asia antes de cruzar el océano Pacífico rumbo a Estados Unidos.

PD: No sabemos si lo dicen en serio o en broma, pero en su último mail nos piden transmitir un mensaje más “a quien corresponda”: “Nos estamos quedando sin un duro, y a buen entendedor…”.