Los chimpancés Antoine y Bingo llegan a Villena
Los chimpancés Antoine y Bingo han llegado a Primadomus desde la sede de la Fundación AAP en Almere. El traslado obedece a poder brindar un retiro adecuado a estos dos animales ya que su residencia española ofrece las mejores condiciones, sobre todo si las comparamos con su desdichado pasado en cautiverio. Además, al dejar una instalación libre en la Fundación en Almere, se podrá proceder al rescate y resocialización de otros chimpancés que se encuentran en lista de espera, en Holanda.
"El equipo holandés echará de menos a estos dos animales, nos cuenta David van Gennep, director de la Fundación AAP, pues se han hecho querer tras 22 años bajo el cuidado de la Fundación. Pero nos debemos a nuestro trabajo: seguir rescatando animales. Bingo y Antoine viajan a unas instalaciones y un clima mucho más benigno del que pueden tener aquí y así podemos seguir avanzando en la lista de espera de animales que queremos rescatar.
Llegada a Villena
Después de un viaje de dos días y más de 2.000 Km, Bingo y Antoine podrán volver a caminar, correr y jugar esta vez en sus nuevas instalaciones en Primadomus. Durante el viaje de aproximadamente 26 horas los animales son revisados y alimentados con regularidad por los cuidadores que los acompañan y los conocen bien, para asegurar su bienestar. Su nueva residencia está constituida por los dormitorios, perfectamente equipados para estos dos chimpancés que conviven desde hace varios años, y un recinto exterior de más de 3.000 m2, con vegetación natural y plataformas que servirán de enriquecimiento para los nuevos residentes.
Antoine y Bingo
Ambos chimpancés se enfrentan a un futuro que contrasta con su situación antes de ser rescatados por AAP. Antoine, que ahora tiene 37 años, vivió más de 10 años en un sótano sucio sin luz natural en una casa de campo belga. Su excéntrica dueña lo mantuvo separado de la otra chimpancé que poseía: una hembra llamada Prudence. Podían oírse pero no tocarse ni verse, en medio de la suciedad acumulada a lo largo de los años, pues no tenían un mínimo mantenimiento de su jaula.
Cuando llegaron hasta AAP en 1991, Prudence fue capaz de relacionarse bien con otros chimpancés. Sin embargo para Anoine todo fue mucho más difícil: tuvo muchas dificultades en relacionarse con otros chimpancés, hasta el punto de llegar a considerar la posibilidad de que no podría vivir con otros animales. Hasta que hace 5 años llegó Bingo y logró conquistar el corazón del traumatizado Antoine. La etóloga de AAP Godelieve Kranendonk nos cuenta que "gracias a la terapia intensiva y la introducción del juguetón y desenfadado Bingo, Antoine ha podido finalmente vivir con un compañero. Socializar a los animales que rescatamos es nuestra mayor prioridad, pues los primates son animales sociales, y su recuperación y bienestar pasa por poder vivir con otros individuos de su misma especie".
Bingo, de 44 años de edad, es muy sociable y juguetón, lo que es raro para un animal tan mayor que ha vivido solo la mayoría de su vida. Después de ser abandonado en un mercado por un circo ambulante, en 1974, pasó alrededor de 30 años en un viejo zoológico italiano, solo y en una jaula vacía sin ningún tipo de estructura. En 2004 fue rescatado por la Fundación AAP. Así, en estos últimos años, el alegre chimpancé Bingo ha sido el fiel compañero de Antoine, haciendo así posible la vida en grupo de estos dos animales. Ambos podrán tener una vejez en paz y disfrutar de las instalaciones de Primadomus de ahora en adelante.
Mejorar la legislación en Europa
Por desgracia, en Europa siguen habiendo muchos primates como Bingo y Antoine mantenidos como mascotas. Por ello AAP trabaja en España, Países Bajos y Europa en colaboración estrecha con otras entidades y organizaciones nacionales e internacionales para conseguir una buena legislación en toda Europa que proteja a los primates y prohíba que sean tenidos como mascotas.