Dice un amigo mío que, contrariamente a lo que se piensa, el deporte nacional no es la envidia, sino el desprecio. Leyendo el último artículo de Juan Palao sobre la visita del Secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, no me ha quedado más remedio que darle la razón a mi amigo.
Porque efectivamente lo que del escrito de este señor se traduce es el profundo desprecio que siente por todo aquello que sus propias narices no ven. Para el señor Palao la visita carece de importancia, a fin de cuentas únicamente vino a Villena el cargo más importante del Ministerio de Fomento después de la Ministra, pero a Palao le supo a poco. Seguramente porque él compartió durante sus años como concejal del equipo de gobierno del Partido Popular reuniones más importantes de las que nunca tuvimos noticia. Y si no tuvimos noticia, es porque efectivamente nunca se celebraron.
Desprecia Juan Palao esta visita seguramente porque lo que vino a decir el Secretario de Estado el otro día, es lo que a él le hubiera gustado que le dijeran los suyos cuando gobernaban este país. Pero como todo el mundo sabe a estas alturas, mientras el PP gobernó el estado español, las puertas del Ministerio de Fomento siempre estuvieron cerradas para Villena.
De ahí que ponga en boca del Secretario de Estado cosas que no dijo, porque Víctor Morlán afirmó que el resultado del soterramiento hecho en trinchera o por medio de tuneladoras era el mismo. El resultado. Cosa que se encargó de remarcar varias veces para que no se produjera confusión. Pero Palao no es que se confundiera, es que, con esta afirmación que no debió escuchar bien, trata de confundir a los demás.
También desprecia Juan Palao el soterramiento, afirmando cosas como que las vías enterradas bajo tierra interfieren nuestro desarrollo urbanístico. Por muchas vueltas que le he dado no he acabado de entender esta categórica afirmación. Lo único que saco en claro es que a él le parece estupendo esperar quince años, que no serán quince, seguro, a que la estación quede integrada dentro del casco urbano, despreciando así la posibilidad de que lo esté de manera inmediata una vez se produzca el soterramiento. Con esta afirmación el señor Palao también está despreciando la posibilidad que los villeneros y villeneras dispongan dentro de su población de un acceso al transporte ferroviario convencional que les permita acudir, por ejemplo, a las universidades de la provincia. Y lo hace porque seguramente para él no suponga una molestia desplazarse tres kilómetros para coger el tren todos los días, sin embargo para los universitarios y para muchos trabajadores sí.
El Secretario de Estado de Infraestructuras dejó bien claro que las estaciones alejadas de los núcleos urbanos no son utilizadas por los ciudadanos. De lo que aquí se trata es de quitar coches de la carretera y con el soterramiento de las vías convencionales se consigue, aunque al señor Palao no le importe.
Otra de sus afirmaciones categóricas es que los convenios siempre son a terceras partes, sacando a relucir los firmados con Cádiz y con Castellón. En esto Juan Palao también se guarda algo, porque si bien es cierto que los convenios firmados por gobiernos anteriores son diferentes, no han sido siempre al 50+25+25 como afirma, los hay de todo tipo. Por ejemplo, en Getafe el gobierno Aznar dejó colgado al ayuntamiento y a la Comunidad de Madrid, teniendo que soportar estas dos administraciones el soterramiento. Sin embargo aunque Palao lo dude, lo cierto es que este gobierno y concretamente la Secretaría de Estado de Infraestructuras los convenios que plantea son siempre de la misma forma: Estado Español + Comunidad Autónoma + Ayuntamientos. De lo que se hizo anteriormente con los gobiernos del Partido Popular ya se sabe, en el caso de Villena, nada de nada.
Lanza Palao una pregunta al aire, que fue contestada con bastante precisión por el Secretario de Estado durante la cena de trabajo que mantuvo con los miembros de la Comisión Especial del Soterramiento. Se pregunta Palao por qué no se soterra también la estación del AVE; lo peor de todo esto es que la respuesta a esta pregunta el señor Palao la sabe, pero como en la mayoría de las afirmaciones de su artículo prefiere jugar a la confusión. Juan Palao sabe que la línea del AVE no será soterrada porque cuando gobernaba el estado español el Partido Popular, se despreció esta opción tan beneficiosa para la ciudad de Villena. Se despreció esta opción ignorando las justas peticiones de la ciudadanía, engañando a la gente e inventando argumentos que al final no han resultado ser más que excusas. Porque no debemos olvidar que el PP en el gobierno de Madrid, encargó y aprobó el estudio informativo, el estudio de impacto ambiental y el proyecto básico. Todos estos complejos documentos estaban ya aprobados cuando el PSOE accedió al gobierno de la nación. Por eso seguramente nadie recibía a Palao y a los suyos en el Ministerio de Fomento, porque sabían que le estaban jugando una mala pasada al pueblo de Villena. Puede Palao despreciar las palabras de Víctor Morlán, pero lo que no puede hacer es negar los hechos. Y los hechos son que miembros de su propio partido, llámense Zaplana, Camps o el propio García Antón, no han dejado de acusar al gobierno de la nación de retrasar las obras del AVE de Madrid a Alicante. ¿Qué hubieran dicho éstos si el gobierno de Zapatero hubiera decidido tirar a la papelera los proyectos encargados por el PP y se hubieran retrasado las obras del AVE seis años más?
Esa es la situación que nos encontramos en Madrid, esas son las razones por las cuales el actual Secretario de Estado de Infraestructuras optó por la solución que el otro día presentó en Villena: soterramiento de las vías convencionales en todo el casco urbano y parada del AVE. Ni el señor Palao, ni ninguno de los miembros de su partido en Villena, en Valencia o Madrid, consiguieron algo mejor para nuestra ciudad, aunque ahora Juan Palao lo desprecie.
Y por último, nadie ha traído al señor Morlán a Villena. La decisión de venir la tomó el propio Secretario de Estado de Infraestructuras para informar a la población de sus compromisos para con nuestra ciudad. No podemos decir lo mismo de los miembros del gobierno de la Comunidad Autónoma Valenciana, que vienen a Villena escondiéndose, sin dar la cara, porque saben que tienen una deuda con Villena, deuda que también prometieron en campaña electoral, y no sólo es que no hayan movido un dedo para cumplir sus compromisos, sino que además se vienen encargando desde que esta ciudad está gobernada por la izquierda, de torpedear y retrasar el cumplimiento de esas promesas. Porque también supimos el otro día, de boca del propio Morlán, que el Conseller García Antón nunca ha llevado a Madrid ni un solo documento que hablara del alejamiento de todas las vías, postura que defienden tanto Palao como el Partido Popular. Sin embargo es un nuevo embuste, un nuevo engaño al pueblo de Villena: en los medios de comunicación se defiende que se trabaja por el alejamiento de todas las vías y lo que realmente se está haciendo es nada. Lo que hubiera provocado, de no aceptar el Ministerio de Fomento la propuesta de la alcaldesa de Villena, que las vías convencionales se hubieran quedado donde ahora están, y las del AVE por donde están proyectadas.
Si los ciudadanos de Villena, como dice Palao, tienen que razonar de cara al próximo 27 de mayo, el propio Secretario de Estado ya les dio suficientes argumentos de quiénes han trabajado y seguirán trabajando por el desarrollo de Villena.
