Los fuegos artificiales del día 7 podrían seguir disparándose desde el Castillo
El equipo de gobierno local está intentando que el tradicional castillo de fuegos artificiales del día 7 de septiembre, con motivo de las Fiestas de Moros y Cristianos, se siga lanzando desde el Castillo de la Atalaya. Así lo va a solicitar a la Subdelegación del Gobierno en Alicante, mediante un informe técnico que avala esta posibilidad dentro de la nueva normativa de seguridad en espectáculos pirotécnicos, que ha entrado en vigor este año.
Hace dos semanas los concejales de Fiestas, Isabel Micó, y Seguridad Ciudadana, Carlos Beltrán, abordaban este tema en una reunión con técnicos del Ayuntamiento, de la Policía Local y de los Bomberos estudiando el plan de seguridad realizado para este evento, así como la nueva normativa. Nuestra intención era conservar los fuegos artificiales en el Castillo, por considerar que es el sitio donde históricamente se vienen disparando y por eso hemos buscado en la normativa los resquicios que nos permitan salvar esa tradición cumpliendo la ley, manifestaba la edil.
Así se vio que el quid de la cuestión está en el calibre de las carcasas que se utilizan en estos fuegos, en función del cual se establecen los perímetros de seguridad de la zona donde se realiza el disparo, que son de 35 metros para edificios y de 60 metros para el público. Asimismo se valoró que dentro de ese perímetro solo existen dos edificios públicos el departamento de Urbanismo y el centro Colache, que durante las fiestas estarán cerrados, por lo que no requerirían vigilancia, comentaba el concejal.
Y según dice la normativa, a los residentes de la zona aledaña al Castillo, se les informará mediante carteles informativos, de que se va a producir ese espectáculo, su horario y duración. En cuanto al público que va a visionar los fuegos artificiales, se le impedirá que acceda a menos de 60 metros de la base del Castillo, desde donde se efectuarán los disparos, lo que se establecerá en el plan de seguridad.
Ahora desde la Policía Local se está elaborando un documento que se dará a la pirotécnica que resulte adjudicataria de los fuegos artificiales, para que lo firme como una declaración de responsabilidad asumiendo las medidas de seguridad que desde la Policía se estipulen. Del mismo modo habrá unas cláusulas especiales en el contrato que la empresa firme con el Ayuntamiento para cerrar aún ese círculo de seguridad, explicaba Micó.
Creemos que cumpliendo estas normas, Villena podrá mantener este espectáculo en el Castillo, porque tenemos la suerte de que la trama urbana que tiene la ciudad alrededor de la fortaleza permita estas actuaciones, decía Beltrán. No obstante, recordaba que la decisión final es de la Subdelegación del Gobierno en Alicante. Por eso la propuesta del Ayuntamiento irá lo más documentada posible, con todos los parabienes municipales para que Subdelegación no tenga ninguna duda, apuntaba el edil.
Plan B
Por si finalmente no se autorizase el disparo desde allí, se optaría por trasladar los fuegos a los terrenos que hay frente al cuartel de la Policía porque es una de las pocas opciones, aunque creemos que no es un sitio muy bonito y la visibilidad sería reducida desde muchos puntos del casco urbano, al encontrarse en un hondo, manifestaba Micó.
