Los ladrones aprovechan las fiestas de Moros y Cristianos para robar en una finca agrícola de Villena
Los propietarios de una finca dedicada a la agricultura han denunciado ante la Guardia Civil los robos que sucedieron en dos de las casas de la misma durante la madrugada del 9 al 10 de septiembre. Los afectados están hartos de la oleada de robos que afecta a las explotaciones agrarias de Villena desde hace tiempo y aseguran que lo mismo les ocurre a otros agricultores de la zona, que hasta se estarían planteando abandonar esta actividad.
Al parecer varias personas aprovecharon la última noche de las fiestas patronales para acceder a esta finca privada, cortando parte de la valla, con el objeto de robar una molineta, para lo cual tiraron la torre, partiéndola por la mitad. Escalaron las paredes para acceder al interior de la casa y rompieron ventanas, además de sustraer los convertidores de energía y reguladores e inversores. Otro robo de las mismas características sucedía la misma noche en otra de las casas de la finca. Los hechos han sido denunciados ante la Comandancia de la Guardia Civil de Villena.
Los dueños de la finca afirman que Villena está sufriendo una oleada de robos y delincuencia que desde hace años se veía venir. Y se ha denunciado la sustracción de tejas, puertas y ventanas y la rotura de vallas sin resultado alguno, lo que para ellos presagia la continuidad de los citados hechos delictivos.
Consideran penoso que el esfuerzo y lucha de los agricultores y empresas dedicadas a la agricultura por mantener sus fincas y sus casas, se tiren por tierra con estos robos, por lo que se sienten impotentes, desolados, desprotegidos e indefensos. Esto hace peligrar el futuro de las fincas y la agricultura en Villena, aseguran, ya que muchos propietarios se plantean abandonar las fincas, en lugar de mejorarlas y ampliarlas. Esto sería una verdadera catástrofe para la ya tan resentida agricultura, advierten.
Ante tal situación el colectivo de agricultores se está empezando a movilizar, para tomar las medidas que procedan al respecto, señalan los afectados. No obstante, recuerdan que son los políticos quienes deben poner los medios para velar por la seguridad, elaborar las leyes, endurecer las penas y ejecutarlas en su integridad. Y les piden que no hagan oídos sordos ante estos hechos. No pueden hacer oídos sordos a estos acontecimientos que suceden continuamente, no vale salir en la prensa manifestando lo mucho que lo sienten, porque puede que dentro de un tiempo lo sientan de verdad, concluyen.