Los motivos del récord de valor histórico del US Tech 100 conseguido en julio

Uno de los sectores empresariales que más está creciendo en los últimos tiempos es, sin duda, el tecnológico. Los grandes avances que se han producido en este campo en un corto periodo de tiempo, han permitido la proliferación de iniciativas empresariales relacionadas con esta materia. Hoy en día, muchas de las grandes compañías a nivel mundial centran su actividad en el desarrollo y la innovación en este ámbito.

Esto no ha pasado desapercibido para otros actores que tienen gran importancia en el mercado: los inversores. Y es que, en muchas ocasiones, la apuesta favorable de un inversor ha sido la primera piedra para la construcción de ciertas iniciativas empresariales relacionadas con la tecnología.

Sin embargo, bastante tiempo atrás, esto no era tan fácil, y algunas compañías se veían con problemas para entrar en el mercado bursátil, al no trabajar con productos financieros. Por ello, en 1985, se lanzó el Nasdaq-100. Se trata de un índice bursátil que incluye a las 100 empresas más grandes y líquidas del mercado Nasdaq, excluyendo a las del sector financiero. Está principalmente centrado en las de carácter tecnológico.

Casi 40 años más tarde de su creación, este pasado verano se ha dado un hecho histórico. Y es que el Nasdaq-100, también conocido como US Tech 100, batió su récord de valoración en bolsa, llegando a los 20.391,97 puntos el pasado 5 de julio. Este logro, que será para siempre recordado en el mercado bursátil, se explica por diversos factores. A continuación, algunos motivos de este éxito.

Gran comportamiento de las empresas tecnológicas

Hay que tener en cuenta que este índice lo forman firmas tan importantes como Apple, Microsoft, Amazon o Alphabet. Partiendo de esta base, el éxito es fácil de explicar. Se trata de compañías que han reportado resultados sólidos desde el punto de vista financiero, y que han experimentado un crecimiento de ingresos importante en los últimos años.

A su favor también juega el hecho del buen aprovechamiento que han hecho de las innovaciones tecnológicas, como la inteligencia artificial o la computación en la nube. Han apostado por implementar este tipo de elementos, lo que les ha generado un mayor reconocimiento por parte del público y una mejor valoración.

Mejoría del contexto económico y de las inversiones

Después de un periodo incierto, marcado por la pandemia y una inflación posterior que resultó fatal, parece que la situación económica se ha estabilizado. Eso ha provocado una mayor confianza en los mercados y, sobre todo, más tranquilidad para el sector tecnológico en particular.

También ha repercutido en el consumidor. Los productos tecnológicos suelen tener un precio elevado, y si la situación económica es buena, la demanda puede seguir creciendo.

Política monetaria y tipos de interés

Como por todos es sabido, la situación de Estados Unidos a este respecto sigue siendo la misma que en los últimos meses. La Reserva Federal continúa firme en su propósito de mantener los tipos de interés altos, con el fin de seguir controlando la inflación, por lo que en la economía americana aun no se ha podido notar ningún beneficio de una posible reducción de estos valores.

Sin embargo, a nivel europeo el contexto es completamente distinto. El Banco Central Europeo anunció semanas atrás su decisión de reducir las tasas de interés después de un tiempo en valores altos, ante la fuerte subida de precios que sacudió al viejo continente. Ahora, en grandes potencias económicas como Alemania, Francia o España, el crédito fluye con mayor facilidad. Eso beneficia a las empresas tecnológicas, que también operan en esos mercados.

Innovaciones y tendencias del sector

Como se mencionaba anteriormente, las empresas tecnológicas están aprovechando claramente las innovaciones que están apareciendo en el sector. Elementos como la Inteligencia Artificial, cada vez más presente, o el aprendizaje automático y el 5G, están siendo clave para que estas compañías sean vistas como muy atractivas para consumidores e inversores.

Además, en el caso de los segundos, el hecho de que las empresas apuesten por trabajar con estas nuevas herramientas, resulta un valor muy importante. Y es que todo hace pensar que esas tecnologías seguirán creciendo, lo que implicaría que el valor de las compañías que las utilizan fuese por el mismo camino.

El apoyo de los estados

Todos los países están apostando muy fuerte por el sector tecnológico. Ya sea a nivel de subvenciones o de ayudas, intentan que este mercado crezca. Llevan a cabo esta intención de dos maneras bien distintas. La primera, ayudando a las compañías a desarrollar sus proyectos, con apoyo económico. Por otro lado, también contribuyen a que los ciudadanos se acerquen a la tecnología, ya sea con formación para ayudarles a entenderla, o con bonos para que puedan acceder a ella.