Desde el pasado verano, los problemas en los Centros de Salud de Villena se han multiplicado. La disconformidad entre facultativos y enfermos está haciendo la situación poco menos que insostenible. Los enfermos se quejan, con razón, de la falta de atención, mientras que los médicos ponen el grito en el cielo ante la cantidad de enfermos que tienen que visitar en cada consulta.
Según ha podido saber EPDV, los facultativos están demandando más médicos para poder disponer de más tiempo que dedicar a los pacientes, pero esta medida es cara para la administración y con toda la desfachatez del mundo incrementan el número de pacientes en cada consulta, llegando a atender en ocasiones más de 7 u 8 enfermos cada cuarto de hora, señala un médico que prefiere mantener su anonimato. Pero este problema se acrecienta cuando el médico tiene que atender las Urgencias tanto en el Centro como a domicilio, además de las visitas domiciliarias como por ejemplo en Las Virtudes como es el caso del Centro de Salud I, y por si fuese poco también tienen que atender a los pacientes del Sintrom.
Todo esto hace que la consulta se masifique y que médicos, enfermeras y administrativos parezcan los culpables de esta situación, cuando el único responsable es la administración, insiste. Si esta situación ya es de por si insostenible, imagínense cuando, además, los facultativos de turno tienen que atender en su consulta a los pacientes de los médicos que se encuentran de baja o vacaciones, porque al no haber sustituto es el médico de cabecera el que tiene que atenderles, y todo ello sin cobrar un duro, así que negocio redondo para la administración a costa de los médicos, que son quienes finalmente se ven amenazados, e incluso agredidos, por sus propios pacientes.
Hojas de reclamaciones
Existe gran malestar entre los facultativos por toda esta situación, que los pacientes, en ocasiones, no saben entender, y por eso arremeten contra el médico de cabecera sin pensar que existen unas hojas de reclamaciones que son primordiales para remediar este desaguisado, y es aquí donde les duele a los dirigentes. Por parte de los facultativos se está negociando para que con urgencia se amplíe el cupo de médicos para que se pueda cumplir el horario y permitir que la asistencia sea lo buena que debe de ser.
En la actualidad, la mayoría de médicos sobrepasa las 1.500 cartillas a su cargo, llegando en ocasiones a tener 1.800 cartillas para atender. Únicamente un facultativo no alcanza estas cifras tan desproporcionadas.
Por todo ello, los médicos quieren hacer un llamamiento a los ciudadanos, instándoles a utilizar las hojas de reclamaciones para hacer valer sus quejas ante la administración, ya que enfrentarse con los médicos no conduce a nada.
