Más reflexiones de un votante
Parecería, según he leído en un artículo de EPdV, que el Estado del Bienestar en España lo hubiera inventado el PSOE, cuando el sistema de Seguridad Social, casi tal como lo conocemos, incluidas las jubilaciones por edad, enfermedad o invalidez, es de mitad del siglo pasado, aunque si seguimos a este paso no nos dura ni una década más.
Al comienzo, con lo que se recaudaba, solidariamente, una parte se dedicaba a gastos médicos, farmacéuticos y otra parte a jubilaciones. Llegando tiempos de bonanza, se añadió el subsidio por desempleo y se mejoraron algunas prestaciones. El problema es que, cuando los tiempos de bonanza cesan, lo esencial hay que intentar que perdure. Si nos perdemos en prestaciones caras e incontroladas conseguimos que el sistema esté a punto de desaparecer.
Cuando asevero lo anterior me baso en un ejemplo que todos conocemos: personas que cesan en una empresa y, encontrándose trabajando en la misma o en otra, cobran el subsidio por desempleo. Y lo peor es que lo vemos bien. Además existen determinados sectores que pretenden que así siga. Si todas las personas que se encuentran cobrando el paro indebidamente dejaran de hacerlo, aquellos que de verdad no encuentran empleo tendrían un subsidio más decente.
Pero hablábamos de lo conseguido por el PSOE. Los actuales gobernantes se dieron cuenta de que estábamos en crisis con casi tres años de retraso, regalando el dinero que no tenían: 2.500 euros por nacimiento, 400 por contribuyente, 400 más por parado... Todo eso para tener que retirar después esos logros sociales, no sin antes dejar el país en bancarrota. Pero encuentran la solución a su despilfarro (recortes sociales históricos): Aumentan la edad de jubilación a los que llevamos toda nuestra vida trabajando (los que tenemos esa suerte), no dejando entrar en el mercado laboral a nuestros hijos, porque no dejamos esos puestos libres, congelan las pensiones, bajan el sueldo de los funcionarios
Respecto a logros como la conciliación entre la vida laboral y familiar, cuya intención es totalmente loable, decir que cualquier ley no acompañada de presupuesto es pura demagogia y pone a los empresarios en un brete: mejor contratar a quien me sale más barato y menos tiene que ausentarse del puesto de trabajo, al menos si no percibo nada por ello...: El Estado invita y los demás pagamos.
Pero lo que acabo de exponer queda muy incompleto en relación con lo que de verdad pienso: Tengamos la ideología que tengamos, no podemos ver que los políticos, por ser de un color determinado, todo lo hacen bien. Hemos de ser críticos con su labor, que es gestionar el dinero que nosotros pagamos con nuestros impuestos. Si a nivel nacional pensamos que los que gobiernan no lo están haciendo bien, pues votemos a quien creamos que lo hará mejor. Si a nivel local creemos que quienes mandan son unos intransigentes, pues votemos a quien pensemos que se comportarán de una forma más democrática. Si a nivel autonómico no se apoyan lo suficiente las políticas sociales y sólo se dedican a construir obras faraónicas en plena crisis, pues votemos a quien creamos que mejor cumplirá nuestras expectativas. Y si no nos convence ninguna de las ofertas, pues votemos nulo, para decirle a los políticos cuán lejos están de los ciudadanos a quienes piden el voto cada cuatro años.