Menos olmos en Villena
El villenense David Molina Molina, vuelve a denunciar desde Internet la desaparición de árboles en nuestro término municipal. Una vez más se trata de ejemplares de especies que eran habituales en esta zona, pero que con el paso del tiempo han sido eliminadas por el hombre. A continuación reproducimos el artículo publicado en su blog particular.
Si os fijáis mínimamente, podréis apreciar las diferencias notables entre estas dos fotografías, en la primera, tomada a principios de verano, podemos ver una maravillosa olmeda, frondosa, densa, fresca, etc. en la segunda imagen podemos ver como esa olmeda ha desaparecido.
De nuevo ha sucumbido incomprensiblemente a pase de motosierra y retroexcavadora un conjunto arbóreo importante para Villena (y ya van demasiados), en este caso, se trata de un bosquete de una especie que se encuentra cada día más amenazada en toda Europa, como es el olmo (Ulmus minor).
El olmo, abundante antaño, viene siendo afectado desde hace tiempo por una grave enfermedad fúngica conocida como grafiosis, causada por el hongo Ophiostoma novo-ulmi, que tapona paulatinamente los vasos conductores de savia del árbol hasta causarle la muerte. Otra causa de su regresión, son las concentraciones parcelarias y las modernizaciones de los regadíos que hacen desaparecer los setos y las acequias, de las que el olmo era pieza fundamental.
En Villena, el olmo, junto con el chopo y el sauce, ha sido uno de los árboles más empleados en la huerta para delimitar parcelas, crear setos cortavientos o sustentar los márgenes de las acequias. Estos árboles cada día son más escasos, con lo que estamos perdiendo el valor paisajístico y la personalidad que aportaban a nuestra extensa huerta. Es triste que en lugar de proteger y respetar estos árboles y arboledas relícticas nos dediquemos a destruirlas.
Esquivando esta enfermedad, y las transformaciones agrarias hasta la fecha, encontrábamos esta olmeda, con una extensión de unos 1.300 metros cuadrados (datos del Sig-pac) de olmos adultos, alcanzando diámetros de hasta 40 centímetros, y que ocupaba casi la mitad de la parcela. Esta olmeda estaba en expansión con numerosos ejemplares jóvenes que se extendían también al otro lado de la carretera, eliminados estos por coincidir con el trazado de una conducción de aguas pluviales.
La olmeda en cuestión se situaba al inicio de la carretera de Villena - Pinoso, y de la que ya hablé en su momento en el artículo sobre el olmo pedunculado y el resto de olmos de dicha carretera. Esta olmeda probablemente derivaba de los olmos de la alineación de la carretera ya que el olmo tiene gran facilidad para reproducirse por medio de estolones.
La razón para eliminar esta impresionante arboleda ha sido, según uno de los trabajadores contratados para arrancar estos árboles, la de preparar el terreno para instalar un vallado (si para colocar una valla hay que eliminar todos los árboles... me parece absurdo). De momento se han respetado los olmos del margen de la carretera, que por suerte, tal vez gracias al citado artículo, ahora están un poco más protegidos por una barrera quita-miedos para evitar colisiones de vehículos.
Y volvemos una vez más a lo de siempre, y es que no sabemos cuidar y proteger lo que tenemos, y a los que sí nos preocupa esta situación tenemos que ver cómo poblaciones de los alrededores, teniendo un patrimonio natural mucho más modesto que el de Villena, invierten dinero, tiempo y esfuerzo en su conservación, querer es poder. Y no me queda más que decir, sólo esperar que seamos capaces entre todos de valorar el resto de olmedas que nos quedan, por ejemplo, la del descampado del instituto, actualmente en progresión, y que debería integrarse en una zona verde municipal.
Desde siempre ha habido gente que tiene una joya y no lo sabe, el mayor problema viene cuando el individuo quiere deshacerse de su "tesoro". En mi modesta opinión, talar una de las mejores olmedas que quedaban en todo el término municipal de Villena es comparable a utilizar una obra de Shakespeare para envolver pescado. INCULTURA TOTAL.