Mickey y Minnie podrían casarse el año que viene en el castillo de la Atalaya
Aunque la noticia aún no está confirmada, son muchos los rumores que apuntan en ese sentido. Preguntada Cate Hernández al respecto, la portavoz del Gobierno municipal no ha querido hacer declaraciones para evitar meter otra vez la pata. Por eso ha instado a los medios de comunicación a que pregunten directamente a Esther Esquembre, la edil de Políticas Animalistas. Mientras, la Plataforma Animalista de Villena ha empezado a recoger firmas en internet por considerar que se ridiculiza a los roedores y se desvirtúan las Fiestas del Medievo. Por su parte, los vecinos del Rabal mantienen silencio y asisten atónitos a esta ceremonia de la confusión y el absurdo. Rita La Cantaora se postula como la encargada de organizar la próxima edición.
La concejala de Turismo, Mercedes Menor, ha afirmado que supondría un honor ser la estrella oficiante de las nupcias entre los famosos ratones, al tiempo que el evento serviría como un gran reclamo mediático a nivel internacional. Si bien ha eludido desvelar a cuánto podrían ascender los royalties de la Disney. Eso sí, la cuota china estaría asegurada por un larguísimo dragón multicolor de gomaespuma. Aunque también se baraja la opción de utilizar un dron de la marca Huawei disfrazado de pato Donald para llevar las arras, sustituyendo así la tradicional ave rapaz. Claro, siempre que AENA no ponga ninguna pega.
El alcalde, Francisco Javier Esquembre, ha admitido en un tono conciliador que esta boda de fantasía sería la mejor solución para contentar a todo el mundo y evitar polémicas por el uso inadecuado de animales vivos. Si bien los sindicatos ya han avisado de que estarán alerta porque quieren que se cumplan los derechos de los animadores, evitando cualquier tipo de explotación laboral y garantizando su autoestima. Cualquiera no está dispuesto a disfrazarse de ratón con tirantes y de ratona con falda y lazo.
La edil de Casco Histórico, Mari Carmen García, ha dicho que estaría muy bien que los Mouses comprasen un inmueble en el barrio. Si bien lo ve muy complicado, no tanto debido a una cuestión económica, sino más bien por un asunto logístico. Y es que media una gran distancia desde su castillo de París a una casa en el Rabal.
Esther Esquembre, que como responsable del área de Desarrollo Económico aporta una pequeña subvención a las fiestas, ha mostrado su satisfacción y alegría dando saltos como una niña caprichosa. Ha conseguido salirse con la suya al erradicar la presencia de animales y humanizar las Fiestas del Medievo. Además, ha generado de paso sorprendentes espectáculos que harán las delicias de todos los públicos. De hecho, el primer edil no descarta tampoco que en un futuro Villena pueda acoger una sede de Disneylandia en el edificio Colache. Un nuevo concepto de parque temático muy sostenible y ecológico.
Por último, Pepe Hernández (Pastillo), muy enfadado y escarmentado con este tema, ha desmentido que vaya a esculpir un palacio de la princesa Frozen con el corcho sobrante del Belén. Simón, su caballo, no ha querido hablar. Para eso ya está Goofy, ha debido pensar el molesto equino. Cualquier parecido con la ficción es pura realidad.