Cuando cualquier espectáculo se convierte en rutinario, parece ser que le prestamos menos atención que cuando se inició; esta es la impresión que podría ofrecer la carpa que se instala todos los años en la fiesta de Fin de Año. Sin embargo, desde que la Concejalía de Fiestas, de la mano de su titular Genci Estevan, cambió el lugar de despedida del año desde la Plaza de Santiago a la Plaza Mayor, el éxito de la carpa ha ido creciendo.
A partir de las 00:30 horas del recién estrenado año, la carpa registró un lleno total. La Orquesta Mundo ya conocida en Villena por su actuación de hace tres años, no defraudó y mantuvo el ambiente hasta las seis de la mañana para deleite de jóvenes, y no tan jóvenes, que eligieron este lugar para comenzar 2007. Público de todas las edades bailó a los compases de esta orquesta que, tal y como estaba programado, dosificó por horas la música. Así, a partir de las cuatro de la madrugada la música bailable para gente menos joven, se convirtió paulatinamente en música rock más acorde con los presentes en aquellas horas.
Poco más podemos añadir a este evento de Nochevieja que trascurrió sin ningún contratiempo. La asistencia masiva de público deja abierta la inquietud de la población para que la carpa continúe en próximos años. Se calcula que 3.000 personas estuvimos presentes en la despedida de 2.006, según apreciaciones de la concejala de Fiestas, que junto con el edil de Medio Ambiente, Antonio Pastor, y el de Urbanismo, José Ayelo, fueron los políticos villenenses que encontramos durante el tiempo que estuvimos disfrutando de la llegada del nuevo año. El comportamiento ciudadano, impecable, ya que no hubo ningún altercado que mencionar y la logística, aseos y servicios por fin estuvieron a la altura de las circunstancias.
Como curiosidad, apuntar que, ante lo extraño de pelucas y cotillones que cada año aparecen por el lugar, habrá que crear algún tipo de premio para incentivar a quienes amenizan la noche, pues la creatividad de los cotillones, junto con los trajes y vestidos de noche, hacen de esta reunión, una mezcla que solamente se puede encontrar en noches como ésta.
