Toca esta semana volver a detenerse en la programación que la Casa de Cultura de Villena nos ofrece con carácter bimensual. Y ya detenido cabe preguntarse qué es lo que uno espera de toda esta propuesta, antes de comenzar a discurrir sobre cada una de las actividades puntuales presentadas. Porque el conjunto no nos condiciona fechas ni gustos particulares. El conjunto así ni siquiera nos pertenece, es más bien una maquinaria en funcionamiento. Y como toda máquina ha sido creada para desarrollar una función. Tiene un objetivo, y se vale de decenas de acciones y tiempos para alcanzarlo.
Aunque al igual que, pongamos, un coche, nuestra maquinaria cultural también recurre a adminículos que no aportan un valor real al objetivo: desplazarnos, pero que suman otros valores a esta función principal: seguridad, comodidad, identidad
Así, esta segunda programación cultural (como la primera), se desarrolla en torno a las actividades que durante años han conformado el corpus de nuestra programación: exposiciones, cine, conferencias, teatro infantil y café-teatro, semanas culturales de los barrios, cursos de verano y conciertos. Alrededor nos encontramos con otras actividades: unas novedosas y otras poco conocidas, como las agrupadas en el Café con libros, A micro abierto, Tertulias o Diálogos. Propuestas que plantean un tipo de participación diferente, más activa, donde nuestras aportaciones forman parte del desarrollo mismo de las sesiones. Y son ellas las que me hacen plantearme quizás la necesidad de un contenedor que las recoja, que las permita llegar hasta quienes por algún motivo no han tenido la posibilidad de conocerlas, que las permita crear materia en crecimiento que consultar, que curiosear, que continuar discutiendo.
Es posible que el carácter efímero de alguna de estas actividades participativas, de creación espontánea diría, no se preste a resúmenes, o que pierda todo su brillo al ser transportado fuera de su contexto. Otras sí. Otras, gracias a los medios técnicos actuales, se pueden prestar a una revisión continua y actualizada con nuevas aportaciones. La revisión a la que se ha sometido el teatro ya en dos ocasiones por parte de grupos y particulares afines a este arte en Villena, o las que se realizarán en el mismo tono con la pintura, la música, etc., no sólo resultarán un material de interés al concluir, sino que dejarán pendientes innumerables datos y matices que deberían servir de motivación para su continuidad. Estas Tertulias van a constituir un análisis sobre el pasado, presente y futuro de cada una de las distintas áreas culturales. Y también van a conseguir el encuentro de un buen número de personas con intereses afines. Un espacio para la Cultura, porque de eso se trataba cuando levantamos esta Casa de Cultura, espero, y no solo de albergarla.
