Otra piedra en el camino

El equipo de gobierno del Partido Popular se ha encontrado una nueva piedra en el tortuoso camino que está recorriendo durante las últimas semanas y meses que, por inesperada, habida cuenta de la excelente relación anterior, resulta más llamativa que los escollos habituales en todo devenir político, un tránsito difícil en épocas de bonanza económica y mucho más complicado, si cabe, cuando las tornas cambian y hay que hacer frente a circunstancias como las que ahora afectan a nuestro país y nuestra ciudad.
Nos estamos refiriendo, obviamente, al malestar hecho público por la Asociación de Constructores (ASOCONS), que si hasta no hace mucho se frotaba las manos al tener conocimiento del programa de obras públicas que van a desarrollar los ayuntamientos gracias a los fondos aportados por el Gobierno central, ahora, al ver que no va a ser tan sencillo conseguir esos necesarios contratos, ha sacado los uñas para hacer valer los derechos de sus asociados e intentar que las empresas de nuestra ciudad los trabajadores de nuestra ciudad, en definitiva gestionen y realicen el mayor número posible de proyectos.
Frente a esta legítima demanda, que posiblemente no haya sido expresada del modo más diplomático posible, se alza el interés general de los ciudadanos, representado por su ayuntamiento, que es quien debe velar por que las adjudicaciones se realicen del modo más transparente y respondan, más allá de intereses concretos, personales o empresariales, al bien común de los ciudadanos de Villena. Tal es el argumento de la respuesta de José Joaquín Valiente, del que no tenemos motivo para dudar, si bien es cierto que la queja amplificada de ASOCONS ya fue hecha pública días antes por Los Verdes y reiterada ahora por el PSOE, es decir, que no sólo los constructores critican al equipo de gobierno, sino que también lo hace la oposición utilizando argumentos similares, por lo que cabe la posibilidad que de todas las partes estén asistidas de algo de razón.
Por ello, y por la importancia de las actuaciones a acometer, consideramos que harían bien las partes en sentarse y buscar puntos de encuentro algo que parece difícil habida cuenta de la tensión que se desprende de las declaraciones y comunicados cruzados, que poco menos que finalizan en ambos casos insinuándose eso de arrieros somos
alcanzando un necesario equilibrio entre el interés general de la ciudadanía y el interés empresarial de quienes, no lo olvidemos, son un sector fundamental en la creación de empleo y en la dinamización de la economía de nuestra ciudad y nuestra comarca.