Para indignados, nosotros
La publicación en el diario Información del artículo Fruterías de indios y pakistaníes copan el mercado con bajos precios y amplios horarios ha causado indignación entre el gremio de fruteros de nuestra ciudad, que han enviado al diario alicantino más de 140 firmas respaldando el escrito, denunciando la destrucción de empleo en el sector, que reproducimos a continuación:
En relación al artículo publicado en la portada del martes 15 de mayo de 2012, numerosas fruterías de barrio de toda la vida, queremos contestarles: Nos parece indignante que hayan publicado este artículo propagandístico en la portada de su periódico. No saben qué infierno estamos pasando y cómo estamos desmantelando negocios que habían pasado de generación en generación por el daño que este movimiento está provocando en nosotros.
Tenemos muy claro por qué los pakistaníes e indios venden barato. Además de como indicaba la compañera Ana Gironés de que la calidad es inferior, nos encontramos ante la tesitura de las incongruencias del sistema, puesto que a los que estamos toda la vida (ya que lo que manifiestan en su artículo de que había un negocio vacante no es para nada cierto) el sistema nos acribilla con la burocracia. Ustedes destacan el hecho de los amplios horarios que mantienen, también pueden observar que normalmente es la misma persona la que lo desarrolla. Hablamos de más de 14 horas diarias ininterrumpidas los siete días de la semana, algo a todas luces prohibido por la ley de prevención de riesgos laborales, leyes que por cierto nos consta que no cumplen, y nosotros nos preguntamos, ¿dónde están los sindicatos? ¿Qué convenio laboral es ese? ¿Eso no es esclavitud?
Asimismo las distintas inspecciones de sanidad, que en numerosas ocasiones nos obligan a realizar gastos astronómicos para cumplirlas, parece que a ellos no les son de obligado cumplimiento. Como detalle se puede observar en la foto de portada que el frutero no lleva ni delantal, ni guantes, ni redecilla para el pelo. Además, en raras ocasiones disponen de cámara frigoríficas para un adecuado mantenimiento de los productos.
No les quepa la menor duda que el empleo que está generando este colectivo inmigrante, para ellos, lo están destruyendo entre los tenderos de siempre. Además el dinero que generan, en su mayoría, lo envían a sus familias en Pakistán, India, China , dinero que están dejando de percibir nuestras arcas y que se traduce en menores infraestructuras y empeoramiento de nuestros servicios.
En definitiva, no queremos parecer xenófobos ni mucho menos, pero esperamos que nos den la oportunidad de que la gente sepa que en igualdad de condiciones tampoco estamos. Nuestro personal tiene contrato, pasa revisiones médicas, tiene una formación y cumple un horario digno.
No obstante, no queremos dejar de señalar que los precios no difieren apenas, es más la propaganda que se está haciendo, a la cual ustedes han ayudado, que otra cosa. El consumidor debe tener en cuenta que es lo mismo 5 kg. de patatas a un 1 euro que 1 kg. de patatas a 0,20 euros, que en ocasiones es lo que suele pasar.
En conclusión, ni los precios son más bajos, ni era un sector vacante, ni cumplen con las condiciones de sanidad y sí están destruyendo empleo. De hecho, podríamos poner numeroso ejemplos de compañeros que tristemente han tenido que cerrar sus tiendas.