Sin duda, si estas Navidades preguntáramos por la calle si usted quiere disfrutar de una larga vida, el 99% de los encuestados afirmaríamos que sí, pero sin padecer ninguna enfermedad claro. Así es, muchas Nocheviejas y muchos turrones junto a la familia o amigos, muchas primaveras saboreando el dulzor de la vida y, mientras todo eso pasa, muchos conocidos y conocidas que van perdiendo, sobre todo a partir de los 40 años, la vitalidad, la energía o simplemente la calidad de vida y el bienestar físico de la primera etapa de la vida.
La Dra. Barbara Ainsworth, de la School of Nutrition and Health Promotion (Arizona State University) presenta en el simposio de fuerza en noviembre celebrado en Madrid la gráfica que pueden ver en la fotografía.
Activo o sedentario / activa o sedentaria. Nuestro estilo de vida marca la diferencia no sólo entre vivir más o menos, sino la calidad de vida y el nivel de dependencia en esos años. Si esto es así el envejecimiento activo es más posible si además se acompaña de una adecuada alimentación, de dormir y descansar lo suficiente y de eliminar el estrés y la ansiedad.
Es evidente que el ejercicio físico ha de adaptarse a las circunstancias de cada persona: edad, sexo, patologías, lesiones o trabajo, pero si acertamos con el tipo y la cantidad de ejercicio físico adecuado a las necesidades de cada uno, mejoraremos notablemente a corto, medio y largo plazo nuestra calidad de vida, contribuyendo no sé si a ser más felices, pero sí al menos a encontrarnos mejor.
¿Qué le pedirías al 2017? Muchos pediríamos salud para mí y para los míos. Afortunadamente incluso la medicina está apostando seriamente por el ejercicio físico como forma de prevenir o paliar enfermedades sufridas por un porcentaje notable de población. Así, el sobrepeso y la obesidad, que es una de las formas en las que se manifiesta un estilo de vida sedentario, se han convertido en el caballo de batalla de los sistemas sanitarios a nivel mundial. Incluso el reconocido científico Stephen Hawking afirmaba que muchas personas mueren por complicaciones relacionadas con el sobrepeso y la obesidad. Comemos demasiado y nos movemos muy poco. Afortunadamente la solución es muy simple: más actividad física y cambio en la dieta.
Feliz año a todos y todas los lectores.
