¡Ya se despejó la incógnita! ¡Ya podemos respirar a pleno pulmón! Que digo a pleno pulmón, eso será donde no haya problemas de olores, porque lo que es en Villena
, pero bueno a lo que iba, ya sabemos lo que intuíamos, que Zapatero no se presentará a la reelección, no será candidato a la Presidencia del Gobierno. Ahora empezaremos a hacer cábalas sobre quien será su sustituto o sustituta.
Y es que mal que nos pese, no sabemos estar sin un líder, aunque en este caso es sumamente importante, ya que se trata del máximo representante del país que se elige de forma democrática. Pero no es éste el único caso en que necesitamos un líder. También necesitamos líderes políticos a escala autonómica y local (obvio la provincial, porque no la considero necesaria). Y llegados a este punto me pregunto, ¿no será más importante el grupo en su totalidad que la persona que lo dirige? ¿No serán más importantes las trayectorias pasadas y las nuevas propuestas, que el individuo o individua que encabece el partido? Pues parece que no.
Poco o nada importa lo que hayan hecho durante su mandato, poco o nada importa lo que digan que van a hacer y cómo piensan llevarlo a término, al fin y al cabo todos son iguales dicen muchas personas prometen mucho y luego no lo cumplen, todos van únicamente a llenarse los bolsillos dicen otras. Pero no es cierto que todos sean iguales, si indagamos y contrastamos datos y trayectorias de unos y otros, comprobaremos que no son todos iguales.
Pero además de todo lo dicho estoy convencida de que más importante que la persona que ejerza el liderazgo, son las propuestas y el grupo en el que se integra, pues un buen equipo produciendo puede conseguir unos resultados muy satisfactorios.
No es necesario entrar en el dilema de si fue primero el líder o el grupo, lo que sí es cierto es que ambos se necesitan, pues si todo grupo precisa un líder; un líder sin grupo que le apoye no es más que un visionario. Pues eso, si no podemos prescindir de una persona que nos guíe, al menos ejerzamos la facultad de pensar por nuestra cuenta y, lo que es más importante: decidir y obrar en consecuencia.
Fdo. Rosalía Sanjuán Ayelo
