Quedan menos de 10 nichos en el cementerio, aunque en 15 días podrán utilizarse ya los nuevos

La escasez de nichos en el cementerio sigue siendo un problema grave. Aunque en febrero el edil de Cementerio, Juan Richart, ya mostraba su preocupación por la posibilidad de que Villena se quedara sin espacio en el cementerio, entonces aseguró que para abril los 272 nichos previstos estarían construidos. Sin embargo, no será hasta dentro de dos semanas cuando puedan empezar a utilizarse, a pesar de que el pasado 25 de abril se agotaron los nichos disponibles, y solo quedan 8 u 10 de los municipales que ha rescatado el Ayuntamiento.
Richart recordaba que en febrero de 2011, el Partido Popular aprobó un proyecto para la construcción de 272 nichos, pero sin asignación presupuestaria. Tras el cambio de gobierno, se incluyeron 200.000 euros para esta partida en los nuevos presupuestos, aunque la tardanza de su aprobación definitiva –que no se hizo efectiva hasta marzo-, ha sido el principal motivo del retraso. De hecho, en febrero la Interventora redactó un informe desfavorable del proyecto constructivo por no existir todavía consignación presupuestaria, lo que obligó al equipo de gobierno a aprobarlo por Pleno. A todo esto se sumó la ola de frío de febrero, que aumentó el número de fallecidos, llegando a las 49 personas y haciendo todavía más urgente que se asegurara la disponibilidad de nichos.

“Meses antes, me puse en contacto con una empresa local que siempre se ha encargado de la construcción de los nichos prefabricados”, relataba Richart. Según el edil, la empresa se comprometió a tener listos los 272 nichos, pero en marzo solo tenían 20 o 25 y tardarían un mes en completar el pedido. El concejal decidió entonces encargarlos a otra empresa con stock suficiente, aunque por la diferencia de tamaño finalmente el número de nichos se ha reducido a unos 260. Al parecer, la empresa local se ha molestado por el trato recibido, pero “cada uno tiene su responsabilidad y creo que ellos no cumplieron con lo que el Ayuntamiento les pidió”, indicaba Richart, que además señalaba que “mi trabajo ahora es tomar decisiones, y no podía arriesgarme. Si no hubiéramos cambiado de empresa, en una semana nos quedaríamos sin nichos”.

Hace un mes y medio empezaron los trabajos de construcción, una vez que dispusieron de todos los nichos prefabricados. Actualmente, la obra está reforzada con puntales, pero deben esperarse 15 días hasta que el hormigón fragüe para poder retirarlos.

Estos nuevos nichos se han construido en el último suelo urbanizado del cementerio, por lo que el año que viene la coalición debería incluir en su asignación presupuestaria unos 350.000 euros: 150.000 para urbanizar la zona y 200.000 para la construcción de los nichos. Richart continuaba insistiendo en que Villena tiene muy poca tradición de incinerizar en lugar de enterrar los cuerpos, pues en 2011 hubo unos 280 entierros y solo 60 incineraciones.

Problemas en la plaza
La Plaza de toros sigue mostrando deficiencias, pues al problema de la sonorización y del aire acondicionado –que se hicieron especialmente patentes este fin de semana en la presentación de las Regidoras-, se suman las dificultades a la hora de recoger el agua de lluvia –lo que ha provocado inundaciones de aceras y garajes- o la rotura de un cristal de la cúpula durante el sábado por motivos que todavía se desconocen.

Según Richart, la empresa constructora no ha solucionado las deficiencias hasta ahora con la excusa de que el Ayuntamiento todavía no cumplía con el compromiso de pagos, pero con la liquidación de la deuda, los servicios técnicos municipales están trabajando para enumerar todas las deficiencias.

El edil también informaba de que se ha tenido que repetir la licitación de las obras de mejora de la sonorización, subvencionadas por la Diputación, porque la empresa exigía que el Ayuntamiento pagara un 50% por adelantado. En el caso del parking de la Plaza, aunque se aprobó su licencia de apertura hace dos meses en Pleno, todavía no se ha puesto en funcionamiento. Richart teme que la empresa exija en algún momento el equilibrio económico, como ocurrirá con la piscina cubierta, cuyo mantenimiento cuesta 900 euros diarios y actualmente tiene unos 350 usuarios, de los 3.000 que esperaba, por lo que el Ayuntamiento tendrá que aportar la diferencia a final de año. “Son concesiones que administrativas que nunca me han parecido bien”, expresaba Richart, que acusaba al PP de no haber sido consciente de la situación económica y haber actuado sin responsabilidad.