Queremos saber más sobre la suspensión de militancia de Richart
En los últimos días, me ha sorprendido la noticia de que el concejal de Obras de Villena, Juan Richart, ha sido suspendido de militancia del partido por el que se presentó a las elecciones locales, Villena Centro Democrático (VCD). Si bien, se ha apresurado a afirmar que él seguirá como concejal del equipo de gobierno al servicio del alcalde de los Verdes.
Según ha confirmado el presidente de esta formación, Juan Carlos Pedrosa, ha aplicado esta sanción sobre el concejal y cinco miembros más de su ejecutiva, sin que hayan transcendido los motivos por los que ha adoptado esta grave decisión, informando únicamente que se debe a actitudes y acciones llevadas a cabo por estos integrantes de su partido.
Las especulaciones sobre los verdaderos motivos de la expulsión son muchas; si bien, tratándose de un concejal electo que obtuvo sus votos presentándose bajo las siglas de un partido, debieran de conocerse, para que aquellos que confiaron en esta formación sepan qué es lo que ha pasado y qué pueden esperar en el futuro. Máxime cuando tienen que ver con un concejal acusado de prevaricación, que el próximo 3 de octubre tendrá que sentarse en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial, enfrentándose a penas de inhabilitación de cargo público de ocho años.
En este caso, la opacidad sobre los motivos agrava más si cabe las especulaciones, mostrándonos a un concejal que a toda costa niega la mayor y se aferra al cargo de forma enfermiza.
La historia se repite, puesto que este concejal, en la pasada legislatura, ya tuvo graves problemas con el PP, que entonces era su partido, renunciando a su afiliación y quedando como concejal no adscrito. Entonces se presentaba como víctima y declaraba que no había tenido más remedio que irse del PP por la actitud dictatorial de la alcaldesa. Ahora es su propio compañero de partido quien lo echa de la formación.
Pero es necesario conocer los motivos, porque no olvidemos que sigue ostentando todas sus delegaciones, y por lo que dice no tiene intención de renunciar a las mismas. Actualmente es Teniente Alcalde, miembro de la Junta de Gobierno Local, Presidente de la Comisión de Urbanismo y concejal delegado de Obras y Servicios. Es más, es este mismo concejal quien ejerce como instructor de los expediente de infracción urbanística que se producen en Villena.
Si existen actitudes y conductas de un concejal que merecen ser sancionadas, como ha denunciado el presidente de VCD, debiera manifestarlas y ponerlas en conocimiento del alcalde. Está en manos del alcalde que siga teniendo las manos libres para hacer lo que le venga en gana mientras este concejal no decida dimitir y entre entonces como concejal el siguiente de su lista.
VCD debe decir claramente en qué han consistido estas conductas, y una vez que sean conocidos los motivos por toda la ciudadanía, si este concejal no dimitiese, debiera tomar el Alcalde las medidas oportunas.