Respuesta del ex-utillero ante las acusaciones de agresiones físicas y verbales al presidente y el secretario del Villena C.F.
Ante las acusaciones vertidas hacia mi persona por el presidente del Villena C.F., Sixto, y el directivo Remigio, quiero contar mi versión a la afición del Villena y al resto de la ciudadanía.
El 20 de junio de 2016 hubo junta y salieron elegidas estas personas y yo les di la enhorabuena. El día 21 me llamó María Ángeles y me preguntó si iba a subir a la sede, y le dije que no porque yo ya había terminado con la lotería, y me dijo que se había dejado el libro de actas y había quedado el 22 con Sixto para entregárselo, pero como ya había devuelto las llaves no podía recogerlo para entregárselo. Entonces subí y no pude entrar, porque ya habían puesto en candado en la puerta. Se lo dije a María Ángeles y ya se encargó ella de arreglar este asunto.
El día 22 sobre las 11 de la noche me llamó Sixto para que le diera las llaves de La Solana y le dije que se las entregaría a Jorge Pérez, gerente de la Fundación Deportiva, que fue quien nos las dio a nosotros en su día, y ahí quedó la cosa. Después hice inventario sin que apareciera nadie por aquí, así que avisé a Jorge Pérez, que bajó un día e hizo fotos de todo. Entonces quedé con él para entregarle las llaves el día 29 (fui y no estaba), y finalmente se las di el 30. Dejé en el pasillo un frigorífico, las mesas, los pies de hormigón y unos tableros que eran míos, y por la tarde vino mi hijo a recogerlo con la furgoneta. Avisé a Quique, el conserje, que nos abrió, cargamos y nos fuimos. Yo hice el cierre del cuarto de la ropa, puse perchas en el vestuario, tacos, tornillos y no cobré nada, y no dejé el frigorífico y las mesas porque nadie se dignó a dar la cara y hablar.
A los dos días de entregar las llaves hablé con J. Antonio, el entrenador, y le dije que no iba a seguir porque nadie me había dicho nada. Me comentó entonces que unos días antes había hablado con ellos y le dijeron que iban a poner al Reyes, y él les dijo que al Reyes no lo querían, pero yo le dije que no les dijera nada de mí, porque había encontrado trabajo y no podía seguir siendo el utillero.
Mi remuneración era de 350 euros al mes trabajando martes y jueves de 8 de la tarde a 2 de la mañana, viernes hasta las 3 de la mañana, y el sábado 4 o 5 horas más y el domingo todo el día. Después de pintar el campo me comía un bocadillo allí. Luego el partido y después a lavar ropa hasta las 12 o la 1 de la noche.
Que sepan los socios que el dinero que me pagaban no salía de sus cuotas, sino del trabajo que hacía lo lunes durante 10 años vendiendo lotería del club. He cobrado por ser utillero durante cuatro años. Los otros seis años han sido por la cara, para ayudar al club. Quien quiera que vaya a administración y pregunte a Juanfe quién es Lorenzo, y le pregunte también por la anécdota de los 8.000 euros de un sorteo de navidad. De esos 10 años que he llevado la lotería le calculo unos 10.000 euros de beneficio al año. Yo cobraba 350 euros 10 meses al año, 3.500 en total, el resto para el club, y conste que los dos meses de vacaciones seguía repartiendo la lotería.
Cuando vino el Rayo Ibense en pretemporada, al llegar yo al campo me dicen que estaban jugando con los balones del Rayo y que Reyes y Melenchón habían dicho que yo me los había llevado. Yo tengo la conciencia muy tranquila, pero el Mele no la tiene; que diga lo que hizo con el talón que falsificó la firma a un compañero y se fue al banco a cobrarlo y cantó porque le dijeron que le iban a poner una denuncia.
No tuvieron bastante con decir que había robado balones que luego fueron camisetas, el frigo, las mesas Se lo comenté a Jorge y me dijo que hablara con Sixto, que era buena persona y se solucionaría todo. El día del Thader de Rojales fui con mi mujer y mi nieto a ver el partido. Al entrar vi a Sixto y le dije que cuando quisiera hablábamos, y me contestó que no tenía nada que hablar conmigo, que yo ya había robado bastante, y cuál no es mi sorpresa que se echa las manos a la cara y se tira al suelo chillando. Entonces el guarda jurado me coge por la cintura, y Remigio, que estaba arriba, baja a pegarme diciendo hijo de puta, te voy a matar, y coge a mi mujer por los brazos y le empuja para que se quite de delante y pegarme. El guarda jurado me saca fuera, yo le digo que me suelte, que no he hecho nada, y me dice que he agredido a un señor. Yo le pregunto si lo ha visto, y dice que no, pero insiste en que le he pegado, y nos dice que no nos vayamos que se ha avisado a la Guardia Civil, aunque a los 10 minutos nos dijo que nos podíamos ir, y a todo esto mi nieto blanco de ver la injusticia que le estaban haciendo a sus abuelos.
No nos fuimos, esperando a que salieran mi hijo y mi nieto, y me pregunto por qué no les llamaron, y pienso que tenían que pensar qué estrategia seguir y qué mentiras inventar para denunciarme, porque Sixto se fue sobre las 7.30 y presenta en la Guardia Civil un parte médico sin lesiones, pero qué casualidad, después en el juzgado sí aparecen lesiones. Por su parte, el guarda jurado que me había confirmado que no había visto el suceso presenta luego un informe de su empresa donde hace constar el desalojo de un individuo por agresión, qué casualidad. Remigio dice en el juzgado que Sixto estaba en la escalera y él en la puerta, a unos tres metros, con perfecto ángulo de visión, que el denunciado quiso hablar con Sixto y este le dijo que no era el momento ni el lugar, viendo claramente como yo le pegué con la mano y me abalancé sobre él, que cayó por las escaleras, teniendo que intervenir un vigilante de seguridad y siendo yo expulsado.
Ahora yo me dirijo a los aficionados que estaban allí, para que se pongan en contacto conmigo. Tú, Vicente Puch, que estabas vendiendo papeletas y sabes donde estaban Sixto y Remigio. Si lo dices destapamos a estos mentirosos, porque me he tragado una, pero dos no, aunque tenga que recurrirlo donde haga falta, y que conste que la temporada pasada yo ya no era directivo, terminé con la lotería y no seguí, otra mentira de las tantas que han dicho.
El domingo según dice le dieron una paliza. Pues sería después de la comunión, porque estaba en Santa María ni más pancho. El lunes después del Thader subieron mi yerno y mi hija a dar de baja a mi nieto, ni los atendieron, y todos menos uno diciéndoles que sí, que se lo llevaran, que cuanto antes mejor, muy educados ellos. Una persona salió a hablar con mi yerno, y le dijo que no borrara al niño, que si veía algo raro ya hablaría él. Le estoy agradecido aunque no sé quién es.
Cuando se iban llegó la Guardia Civil, les preguntó que pasaba, dijeron que habían ido a dar de baja al niño y les tomaron los datos. A saber qué les habrían dicho a los guardias. A la semana siguiente estaba con Andrés Lorenma y Vicente viendo el Villena, había dos directivos por allí y al rato vino la Guardia Civil, que se portó muy bien. Nos fuimos al lado del coche, preguntaron qué había pasado, les dije que nada, preguntaron quien era el utilero, se lo dije y me subí al pabellón a ver el fútbol sala.
El siguiente partido, creo que contra la U.D. Ilicitana, iba con Juanjo López, el antiguo secretario, y Pepe el taquillero me dijo que le habían dado órdenes de no venderme entradas. Finalmente las sacó mi hijo, y el guarda jurado dijo que tenía órdenes de no dejarnos pasar. Llamé a la Guardia Civil y les dijeron que yo no tengo denuncias del fútbol y que me tienen que dejar pasar, y a Andrés Lorenma le pedí el favor de decirles que lo que me había llevado era mío, respondiéndome que ya se lo había dicho pero no le hacían caso.
Llevo 3 semanas sin subir a la sede y creo que no voy a subir más. Si esto no es acoso y querer hundir a una persona que venga Dios y lo vea. El tiempo pone a cada uno en su sitio y ya hay algunos padres que se están dando cuenta de quienes son. Sobre el comentario en los medios diciendo que el ayuntamiento les ha dado menos dinero porque no les dejaron los papeles bien hechos, decir que María Ángeles se ofreció a ayudarles por si tenían alguna duda y no quisieron, aunque luego digan que la culpa es de la anterior directiva.
Me di de baja en el Ocaso y les dijo a sus compañeros que fui a la oficina a decir que lo echaran. Fui porque me preguntaron por qué me daba de baja, si hubiera querido les habría contado la verdad, pero hay una diferencia entre él y yo. Lo siento por la persona que me hizo la póliza a mí y a mis hijos, ya le dije al jefe de la oficina por qué me daba de baja. Cuando dices las cosas a la cara hay algunos a los que les sienta mal y hacen como los políticos, meter mierda y desprestigiar a las personas.