Restaurante Miguel Ángel, Quiero Delicatessen y Bodega Las Virtudes, un frente común para potenciar el Patrimonio Monastrell
Continuando con la presentación de los nuevos caldos de la bodega Las Virtudes, Pablo Martínez, representante de Quiero Delicatessen y distribuidor de la bodega, en compañía de Restaurante Miguel Ángel, ha llevado a cabo una cena maridaje con los vinos de Las Virtudes. El trabajo ha sido arduo entre cocina y enólogo, pues es de las primeras veces que se maridan el Casa Ritas y el Patojo debido a su reciente lanzamiento.
Juan Huertas y Clara Menor, enólogos de la bodega, hicieron la presentación de la cata, destacando Huertas la coordinación existente entre el personal de ambas empresas para preparar los platos, quedando sorprendido ante la propuesta de Miguel Ángel para maridar el Casa Ritas con alcachofas y espárragos, dejando a los comensales expectantes para cuando llegase dicho plato.
La cena maridaje comenzó con el Sauvignon Blanc 2016 acompañando un tataki de bonito, donde los sabores afrutados del sauvignon realzaron el plato que fue presentado por el chef de la casa, Miguel Ángel Martínez, haciendo hincapié en las características del tataki.
El tinto Casa Ritas 2016, nueva incorporación a la marca Patrimonio Monastrell, de nueva creación y presentado hace tan solo un mes en las instalaciones Bouquet de Quiero Delicatessen, sorprendió muy gratamente a todo aquel que todavía no lo había probado, pues sus especiales características y sus 15 grados fueron el complemento ideal para el plato estrella de la noche, dados de foie con espárragos y crema de alcachofas. Es poco común que un vino tinto se maride con espárragos y alcachofas, pues su sabor puede hacer más astringente el vino, y sin embargo la crema y los espárragos han potenciado los sabores del Casa Ritas, destacaba Huertas.
El plato final, carrillada de cerdo con patatas y salsa de Patojo, acompañó al gran éxito del año pasado en vinos de la provincia, Patojo 2016, un monastrell ecológico que ha roto siendo el actual referente de los monastrell de la zona. Miguel Ángel resaltó la salsa de Patojo preparada para acompañar la carrillera, haciendo espectacular el plato. La comparación entre ambos vinos era inevitable: los dos son buenos vinos, pero por margen muy pequeño me inclino por el Patojo, comentaron los comensales más cercanos.
El postre, un cheese brownie con chocolate negro y helado de nata, fue el encargado de poner sobre la mesa el vino más especial de la provincia de Alicante, el Fondillón Tesoro de Villena Solera 1972, vino al que la bodega Las Virtudes quiere poner, de nuevo, en valor por toda la geografía nacional en próximas promociones. Nombrado por Alejandro Dumas en su obra El conde de Montecristo, representa a la uva monastrell en todo el mundo, y sus como mínimo 10 años en barrica le hacen incomparable entre los vinos de este tipo.
Para finalizar, el presidente de la bodega Las Virtudes, Santiago Torró, agradeció el trabajo del Restaurante Miguel Ángel en esta cena maridaje y su implicación en fomentar los vinos de la tierra. También tuvo palabras de agradecimiento para todos los departamentos de la bodega, pues su trabajo y dedicación son fundamentales para la continuidad de este proyecto, que comenzó hace dos años y que está empezando a dar sus frutos, agradeciendo a establecimientos y particulares la buena acogida que están recibiendo los nuevos vinos lanzados por la bodega.
Nota: Pinchando el enlace relacionado podrán visitar una completa galería fotográfica de la cata-maridada.
