Richart insiste en su inocencia en su comparecencia ante el Pleno
En la noche de ayer de celebró el Pleno Ordinario del mes de noviembre, en el que se debatieron diferentes temas polémicos como el pago pendiente de la Plaza de Toros, cuestiones referentes a los presupuestos y arqueos de años anteriores, la Ruta del Vino o la concesión del servicio de basuras, que generaron intensos debates entre coalición y oposición. Uno de los puntos más esperados era la comparecencia del concejal Juan Richart, que contó con el apoyo de un público entregado que, con pancartas, gritos y aplausos ovacionó al edil, acusado de un presunto delito de prevaricación.
El compareciente disponía de diez minutos para ofrecer sus explicaciones, en las que relató los trámites que sufrió el polémico expediente urbanístico desde febrero de 2007, lo que no fue impedimento, según Richart, para que Celia Lledó y Jesús Martínez le propusieran formar parte de la candidatura del Partido Popular. Según el informe de la arquitecta Leticia Martín, el expediente era legalizable y para intentar regularizarlo se enviaron a la Conselleria de Agricultura en mayo de 2008 informes favorables tanto de la Secretaria Municipal como de la edil popular Mª José Hernández. En aquél momento, como concejal de Obras, sólo gestionaba las licencias de obra menor y no tenía ningún poder decisorio, pues los expedientes urbanísticos se aprueban en Junta de Gobierno. Toda esta documentación nunca se entregó al Fiscal, aunque los populares señalaron que son los técnicos municipales, no los concejales, quienes facilitan la documentación.
Según Richart, el delito del que se le acusa es haber firmado un escrito a su mujer de usual trámite suspendiendo la tramitación del expediente durante tres meses a la espera de la respuesta de Conselleria, pero en ningún momento se paralizó. Siete días después de abandonar el equipo de gobierno por discrepancias con la anterior alcaldesa, Celia Lledó empezó a utilizar esto para desprestigiarme.
En el turno de preguntas, José Joaquín Valiente, portavoz del PP, acusó a Richart de haber mentido, pues hasta agosto de 2007, cuando ya ejercía tres meses de concejal, no supo que se había abierto un expediente contra él, ya que la notificación había llegado al anterior propietario. Además, existía un informe técnico de la arquitecta municipal donde se indica que las obras no son legalizables. Los populares siguieron solicitando la dimisión de Richart, insistiendo en que la acusación del Fiscal no evalúa si se puede o no legalizar la situación, sino que el concejal incumpliera su deber de abstenerse en un expediente en el que tenía interés personal.
Los portavoces del grupo Verde y del PSOE formularon también algunas preguntas que fueron aclaradas por Richart. Juan Carlos Pedrosa comentó en nombre de VCD que de manera feroz el PP ha querido hacer un juicio paralelo. El alcalde tuvo que impedir que Pedrosa hiciera referencias a Celia Lledó, la única persona condenada con sentencia firme.
Richart finalizó la comparecencia afirmando que si su objetivo hubiera sido paralizar el expediente, lo habría dejado en un cajón, pero su voluntad era y es legalizar la situación. Además, hizo referencia a otros indicios de criminalidad que el Ministerio Fiscal tiene en varias causas relacionadas con ediles del PP y nombró las diferentes Juntas de Gobierno en que se trataron expedientes de familiares directos de Celia Lledó y en las que ella votó a favor. Lledó se defendió asegurando que ella no estuvo presente en la Junta en que se aprobó el expediente. En este momento, gran parte del público dirigió sus gritos hacia la anterior alcaldesa y otros tantos exclamaban fuera, mostrando carteles de apoyo a Juan Richart, produciéndose enfrentamientos verbales entre los asistentes.
