Se desprende una clave del techo de la iglesia de Santiago
La pieza, de varios kilos, ha caído sobre el suelo del templo, afortunadamente sin causar daños a nadie
La iglesia de Santiago ha amanecido hoy con un susto. Al parecer, y por causas que todavía se desconocen, se ha desprendido la clave de una de las bóvedas, situada junto al órgano, cayendo sobre el suelo del templo. Afortunadamente no ha causado daños personales.
La pieza, partida en varios trozos, alguno de ellos de considerable tamaño y varios kilos de peso, se encuentra ahora junto al lugar donde ha caído, a la espera de que las autoridades responsables dedican qué hacer a partir de ahora.
En arquitectura se conoce como clave a la dovela central de un arco. También es la pieza central de una bóveda. A veces la clave de un arco se presenta especialmente decorada al exterior diferenciándose del resto de las dovelas, usando para ello una pieza de especial tamaño, distinto color o con relieve.
En fechas próximas a Semana Santa, cuando el templo va a recibir innumerables visitas, cabe preguntarse por el estado del resto de claves y demás elementos arquitectónicos del edificio, dado que un suceso de similares características, con la iglesia llena de gente, puede tener unas consecuencias mucho más graves.
Soy consciente de que mi comentario pudiera resultar polémico, si bien hace unos meses trasladé mi preocupación a mi amigo Luis Sirera Serrano, entonces Presidente de la Junta Central de Fiestas. Creo haberlo comentado también con alguno de los últimos Párrocos.
La puerta de la Iglesia de Santiago abierta, coincidiendo con salvas de arcabucería en la Plaza, una combinación explosiva, nunca mejor dicho.
Son varios los Actos de nuestras Fiestas en los que esta coincidencia se produce. Llegada y despedida de la Patrona, salvas en el momento de la Consagración durante la Misa Mayor…
Hay que estar dentro de la Iglesia de Santiago, para escuchar y sentir como retumban los arcabuzazos en las históricas bóvedas de nuestra joya arquitectónica; ejemplo de estilo «Gótico Levantino», junto a la Catedral de Palma de Mallorca y la Lonja de Valencia.
Los años no pasan en balde, y también Villena ha soportado movimientos sísmicos, afortunadamente de no mucha importancia.
Tienen la palabra los expertos; si bien en mi modesta opinión, se podría seguir con las salvas en la Plaza, pero con las Puertas de la Iglesia de Santiago cerradas, como medida preventiva.
La caída de «la clave» ha sido un aviso.