Si estás ahí, manifiéstate
Como dijo vaya-usted-a-saber-quién en su día, es necesario que todo cambie para que nada cambie. O algo así. Y el caso es el que dicho no va muy desencaminado, al menos a veces (repetimos, a veces, no salten ya las fieras), porque después de darle la vuelta a la tortilla el 27 de mayo, ahí siguen las vías. Y nosotros venga a hablar sobre ellas, como si nada hubiera cambiado.
Les confieso que, en lo que a este tema respecta, Celia Lledó me tiene confundido. Es obvio, y a la vista está, que en su programa electoral el Partido Popular se decanta por el alejamiento de las vías convencionales trasladando toda la infraestructura existente al nuevo corredor del AVE y dejando la estación de cercanías en el casco urbano. Pero no es menos obvio que, a lo largo de la campaña electoral, Celia y el PP jugaron con cierta ambigüedad, dando vivas al alejamiento en el mitin de La Troya y agradeciendo a Francisco Camps y José Ramón García Antón, en el mitin del Patio Festero, haber conseguido la inclusión de la parada del AVE en un protocolo que contempla el soterramiento de puente a puente con un coste de 15 kilos para las arcas municipales. No obstante, ese documento deja abierta la puerta al estudio de otras soluciones de común acuerdo entre las partes, acuerdo complicado de no mediar un cambio en el gobierno de la nación en marzo, ya que el Secretario de Estado Víctor Morlán dijo muy fundado en Villena que o soterramiento o nada. Todo esto, en tanto que declaraciones pasadas, pueden consultarlo en las hemerotecas. Después, llegaron las elecciones y se hizo el silencio.
Desde entonces, nada más que alguna breve pincelada. En julio, el Colectivo por el Alejamiento informó sobre una reunión muy positiva mantenida con la alcaldesa, recordando que Lledó estaba posicionada en las mismas tesis defendidas por el colectivo y reiterando su, por otro lado, totalmente respetable postura: el soterramiento de 2,8 kilómetros no soluciona el problema de Villena. Después de aquello, hubo que esperar hasta el 8 de noviembre para que reapareciera la que algunos ya daban por desaparecida Plataforma pro-soterramiento, indicando que para el actual equipo de gobierno el problema de las vías no es objetivo prioritario.
Ignoro si esto funcionó como revulsivo, pero apenas dos semanas después todo se ha precipitado: de repente, nos enteramos de que el 14 de noviembre hubo una reunión entre el propio Morlán y el nuevo Conseller de Infraestructuras de la Generalitat, Mario Flores, que al parecer afirmó que el protocolo no se firma porque a la alcaldesa de Villena no le gusta, unas declaraciones replicadas por la propia Celia Lledó, que acaba de admitir haber enviando una carta a Fomento dando su visto bueno a la firma del protocolo, un documento al que, dicho sea de paso, algunos de sus compañeros no han dudado en llamar papel mojado a lo largo del tiempo (por no hablar de los membretes). Al admitir el envío de la carta, la alcaldesa volvió a echar mano de esa ambigüedad que me tiene a mí tan despistado, porque en ningún momento se posiciona hablando de soterramiento o de alejamiento, aunque hay gestos, miradas y sonrisas que me hacen suponer que tiene un as en la manga que nos está ocultando
Así, y mientras nuestra alcaldesa se decide a jugar sus cartas, no nos queda otra que esperar. No obstante, y para rellenar el tiempo, me muero de ganas por saber qué piensa el Colectivo por el Alejamiento sobre la firma de ese protocolo que no soluciona el problema de Villena
¿Existe aún dicho colectivo?