Siempre nos quedará la duda (Carta al director)
Si las mujeres mandasen en vez de mandar los hombres, serían balsas de aceite los pueblos y las naciones. Eso dice la letra de una famosa zarzuela. No creo que sea así de simple, pero si no se da esa circunstancia, siempre nos quedará la duda.
Si las mujeres desfilan y al fin lo conseguirán, el hombre será madrino y la mujer capitán. Eso decía un panfleto que repartió la comparsa de Labradores en la Retreta del año 1981. Efectivamente, ocho años después lo conseguimos, desfilar al menos. Después de una serie de vicisitudes entre las que cabe destacar la sentencia firme tras la demanda interpuesta en el año 1987 (este año se cumplen veinticinco años) ante los tribunales de justicia por nuestra paisana Isabel Rodes, que obligaba a la Junta Central de Fiestas a modificar sus estatutos para permitir que las mujeres pudiéramos ser socias activas de las comparsas. El año 1988 las mujeres, ¡por fin!, pudimos participar en nuestras fiestas no solo como objetos embellecedores, sino como mujeres con plenitud de derechos en igualdad con los varones. Ahora bien, no sé si el hombre querrá ser madrino o padrino de alguna comparsa, pero si ese es su deseo está en su derecho de ejercerlo, aunque si no lo hace, siempre nos quedará la duda de si lo evita porque no le interesa o lo hace por otras razones. Y es que hasta la segunda acepción del DRAE las definiciones son idénticas para padrino y madrina, no siendo así a partir de la tercera donde todavía se les asignan funciones diferentes:
Padrino: 3) Hombre que asiste a otra persona para sostener sus derechos, en certámenes literarios, torneos, desafíos, etc. 4) Valedor.
Madrina: 3) Valedora. 4) Mujer que ocupa la presidencia honorífica de un acto o una asociación.
En cuanto a que la mujer pueda ser capitana de su comparsa no veo ningún inconveniente y el citado diccionario lo recoge así en su séptima acepción:
Capitán/capitana: Persona que lidera un grupo o movimiento humano. No dejando lugar a dudas de que puede ser aplicado al caso que nos ocupa. Ya sé que existen otros cargos festeros, pero hoy me ha parecido oportuno detenerme únicamente en estos, a lo mejor otro día me animo a comentar sobre otros.