Sólo Villena presenta su renuncia formal al agua del Júcar-Vinalopó
La desbandada de usuarios del nuevo trasvase Júcar-Vinalopó que se auguraba tras el vuelco electoral registrado en las últimas elecciones municipales y autonómicas celebradas en mayo de 2007 se ha quedado, por ahora, en agua de borrajas. Hasta la fecha, sólo el Ayuntamiento de Villena ha comunicado formalmente a la sociedad estatal Acuajúcar que no cuenten con el municipio como receptor de esos caudales, después de que la nueva corporación municipal, encabezada por la popular Celia Lledó, revocara la decisión de su antecesora, la socialista Vicenta Tortosa.
Así lo confirmaron fuentes de esta sociedad estatal, que ya está prácticamente disuelta para pasar a integrarse en Acuamed, otra sociedad estatal dependiente del Ministerio de Medio Ambiente que tramita todas las obras hidráulicas que promueve el Gobierno, entre ellas los trasvases y las desalinizadoras.
Justo después de las elecciones municipales en las que los ciudadanos castigaron sin contemplaciones al PSOE en los principales ayuntamientos de la comarca del Vinalopó donde hasta entonces la hegemonía socialista parecía incontestable, como Aspe o Elda entre otros, ese vuelco se interpretó como un voto de castigo por el apoyo al cambio de trazado del trasvase.
Al anularse la toma de agua de Cortes de Pallás y trasladarla al azud de la Marquesa, casi en la desembocadura, se ganaban caudales pero en detrimento de la calidad del agua, que ya sólo se podrá destinar para riego. Todos los candidatos municipales del PP hicieron de su rechazo a este trazado bandera, pero un año después sólo Villena ha presentado por escrito su renuncia al Ministerio de Medio Ambiente.
Ninguno de los ayuntamientos restantes que comunicaron su interés por recibir caudales del nuevo trasvase bien a través de misivas por escrito de sus alcaldes o bien previo acuerdo plenario lo han revocado a pesar de que en la mitad de ellos el PP arrebató al PSOE la vara de mando. Se trata de los municipios de Caudete (Albacete), Elche, Sax, Onil, Campo de Mirra, Banyeres de Mariola, Biar, Tibi, Elda y Aspe.
Estos diez municipios, junto a la comunidad de regantes Percam de Monóvar, dos entidades de riego de Elche y otra de Agost que se desmarcaron de la negativa de la Junta Central de Usuarios del Vinalopó a recibir ese agua, mantienen en vigor la petición de caudales que en su conjunto asciende a 30 hectómetros cúbicos (hm3), descontada la cantidad que había pedido Villena.
Mientras tanto, las obras continúan avanzando a buen ritmo. El Ministerio prevé acabarlas a final de año y que, una vez completado el periodo de pruebas, puedan empezar a realizarse las primeras transferencias a mediados de 2009. Dado que la gestión de los recursos del trasvase se ha transferido a la Confederación Hidrográfica del Júcar, será este organismo quien negociará la asignación del máximo de 80 hm3 anuales trasvasables entre los interesados en ser usuarios.
Fuente: Diario Las Provincias
Autor: J.L.
