Cultura

Tapería La Plaza: las tapas y las raciones de siempre en las instalaciones más modernas de Villena

Durante la tarde-noche del jueves tuvo lugar la inauguración de Tapería La Plaza, el nuevo restaurante ubicado en la Pirámide de la plaza de toros y que, tras salir a concurso público, junto con la cantina interior del propio coso taurino, será gestionado por el equipo de restaurante Warynessy, toda una garantía de saber hacer, experiencia y seriedad.
Además de la propia Pirámide, Tapería La Plaza ocupará durante el verano la explanada exterior como terraza de verano, multiplicando su capacidad, lo que obligará a contratar más personal para atender debidamente al público. “Asumimos este proyecto conscientes de lo difíciles que están las cosas en estos tiempos, pero con la ilusión de salir adelante y crear nuevos puestos de trabajo contribuyendo así a mejorar las cosas en la medida de nuestras posibilidades”, decía Nemesio Navalón, cuyas palabras eran suscritas por el alcalde, Francisco Javier Esquembre, que agradecía la valentía de la familia Navalón y a todos aquellos empresarios y emprendedores locales que “apuestan por el futuro y crean puestos de trabajo y riqueza, porque ahora hacen más falta que nunca”.

Platos de siempre, instalaciones de última generación
El acto, multitudinario, sirvió para que cientos de personas –amigos, clientes de Warynessy, vecinos del barrio, algunos miembros de la Corporación, representantes de la vida social y cultural de Villena– conocieran el nuevo restaurante, ubicado en la planta baja de la Pirámide, donde Warynessy ha puesto su sello con una decoración y un diseño sobresaliente –cuyo proyecto y dirección ha estado a cargo de Mercedes Martínez, arquitecta del estudio villenense Q+C Arquitectura y Ciudad– y donde lo seguirá poniendo a partir de ahora con una carta muy completa y a unos precios muy competitivos, es decir, asequibles para cualquier bolsillo. Como nos contaban Bárbara y Nemesio Navalón, responsables de Warynessy, la idea era recuperar “una tasca o una taberna, como el antiguo bar de la plaza de toros, ofreciendo una completa carta de vinos y tapas, pinchos, montaditos o platos como el rabo, las manitas de cerdo, las patatas al horno, habas, caracoles… pero en unas instalaciones totalmente modernas, funcionales y adaptadas a nuestros tiempos”.

Así pues, y entre plato y plato de jamón y mini-raciones de paella, entre vinos y cañas, el público fue descubriendo unas instalaciones que desde este viernes ya están abiertas al público y dispuestas a ser descubiertas por villeneros y visitantes. Tal y como decía Bárbara Navalón, “aquí estamos, dispuestos a trabajar y a hacer las cosas lo mejor que sabemos. Queremos que la gente venga, que nuestros nuevos vecinos se acerquen a conocernos, y que todos descubran lo que hemos venido a ofrecerles, porque seguro que repetirán”.

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