Tebeos para una revolución
Abandonad toda esperanza, salmo 290º
Me decía el otro día el director de esta noble publicación que no solo mi columna del pasado viernes le había gustado mucho, sino que últimamente estaba sembradico -apelativo cariñoso, flexión villenera mediante- y que prefería cuando hablo de libros o de cine a cuando me refiero a lo que él califica no sin cierta sorna "tebeos para mayores". Pues no es por tocar las narices, pero aquí van tres tebeos para mayores como tres soles de grandes, que hablando de tocar las narices denuncian el descontento general ante la actual crisis económica que azota nuestro país.
El término fagocitosis significa, según el DRAE, "Captura de partículas microscópicas que realizan ciertas células con fines alimenticios o de defensa"; es decir, pura y dura lucha de especies a nivel microcelular. No es por tanto mal título para una obra como la del guionista Marcos Prior y el ilustrador Danide, que no trata únicamente de la crisis, sino que denuncia con virulencia la sociedad de consumo cuya estructura viciada es en buena parte culpable de la anterior. Podría decirse que estamos ante una precuela que pone de manifiesto el estado de las cosas, ya desde la misma cubierta con una metáfora visual poderosísima donde una variante del logo de Master Card se convierte en la desigual batalla entre dos células donde la más pequeña tiene todas las de perder. Una obra dolorosa de tan lúcida en la que Marx y Engels han acabado convertidos en muñequitos que se regalan con los menús del Marx Donalds.
Los responsables de Fagocitosis repiten en Revolution Complex, álbum colectivo ya centrado en la crisis con la que nos desayunamos todas las mañanas y nos acostamos todas las noches. Precisamente ambos son los culpables de algunas de las aportaciones más conseguidas del libro: además de la brutal "La pregunta más frecuente que asalta a un/a empleador/a: ¿Cómo despedir correctamente a un/a empleado/a?", que firman al alimón, Danide se responsabiliza de la mayor parte de muestras de humor gráfico, más sangrantes cuanto más ingenuo parece su acabado formal, mientras que Prior demuestra ser uno de los pocos autores de cómic españoles con un discurso político y moral no solo coherente y combativo sino omnipresente en muchas de sus propuestas: véanse "El movimiento de los indignos", "Cortar y cubrir" o su particular homenaje al célebre teórico del noveno arte Scott McCloud. Por otra parte, por el libro se dejan ver autores tan interesantes como Jordi Lafebre, Jordi Pastor o dos equipos creativos como los formados por Sergi Álvarez y Sagar Forniés (los de Bajo la piel) o los italianos que parieron Brancaccio... aunque todos juegan aquí por separado. Será cosa de la crisis.
Finalmente, no me quiero despedir sin recomendarles Yes We Camp!, otro álbum coral que deja testimonio inmediato del movimiento 15M con viñetas de una nómina de autores impecable: baste citar a Sergio Bleda, Enrique Flores, Miguel Gallardo, Pere Joan, Paco Roca o dos clásicos tan diferentes como el gran Carlos Giménez y Jan, cuyo Superlópez se deja caer por una manifestación. No faltan tampoco textos de expertos en política y economía, así como escritores y periodistas; por no faltar no falta ni Eduard Punset. Ah, y en la contracubierta reza lo de "Libro sin ánimo de lucro"... y es verdad, porque puede leerse por la cara en la web de la editorial. Eso es lo que yo llamo predicar con el ejemplo.
Fagocitosis, Revolution Complex y Yes We Camp! están editados por Glénat, Norma y Dibbuks respectivamente.