Tenía tres añitos y nunca dejaba de abrazar su muñeco de trapo de Bob Esponja
Yo no estaba preparada para elegir entre mis adicciones y mi hija. La casa era un caos. El subsidio del paro duraba una semana. Los ahorros se estaban acabando. [1er PASO: Admitimos que éramos impotentes ante el alcohol, que nuestras vidas se habían vuelto ingobernables.] La sentaba a mi lado en el sofá, por la noche, y mirábamos la tele, mientras yo me daba el banquete de sustancias. Tenía tres añitos y nunca dejaba de abrazar su muñeco de trapo de Bob Esponja.
[2º PASO: Llegamos a creer que un Poder superior a nosotros mismos podría devolvernos el sano juicio.] Yo terminaba perdiendo el conocimiento, pero ella no se movía. Aguantaba mirando la tele hasta que también se quedaba dormida. [3er PASO: Decidimos poner nuestras voluntades y nuestras vidas al cuidado de Dios, como nosotros lo concebimos.] Todavía era primavera, pero hacía mucho calor. Yo abría las ventanas. La tele se quedaba encendida toda la noche, como un pariente que te cuida mientras estás enfermo. [4º PASO: Sin miedo hicimos un minucioso inventario moral de nosotros mismos.] Yo me odiaba con muy poca profesionalidad por mis adicciones. Me odiaba lo suficiente para justificarme mi propio maltrato. [5º PASO: Admitimos ante Dios, ante nosotros mismos, y ante otro ser humano, la naturaleza exacta de nuestros defectos.] Ahora llevo trece meses limpia, asistiendo a las reuniones semanales, y esforzándome por seguir los doce pasos, pero todas las noches, a la hora en que ocurrió, deseo morir. [6º PASO: Estuvimos enteramente dispuestos a dejar que Dios nos liberase de nuestros defectos.] Aquella noche ella no se quedó quieta cuando perdí el conocimiento. Cogió la botella de vodka barato y bebió. [7º PASO: Humildemente le pedimos que nos liberase de nuestros defectos.] Después caminó hasta la ventana abierta y trepó a ella por la mesita del teléfono, quizá intentando coger la luna. [8º PASO: Hicimos una lista de todas aquellas personas a quienes habíamos ofendido y estuvimos dispuestos a reparar el daño que les causamos.] Cuatro pisos de caída. Por alguna razón abrí los ojos unos segundos antes de que cayera. Solamente la vi un instante antes de desaparecer. No me di cuenta de que no había sido un sueño hasta que empezaron a golpear la puerta. [9º PASO: Reparamos directamente a cuantos nos fue posible el daño causado, excepto cuando el hacerlo implicaba perjuicio para ellos o para otros.] Ahora, a menudo me asalta la pesadilla de que me levanto del sofá y llego a tiempo de detenerla. ¿Se da cuenta? La pesadilla es que la salvo. [10º PASO: Continuamos haciendo nuestro inventario personal y cuando nos equivocábamos lo admitíamos inmediatamente.] Rezo todas las noches. Me arrodillo frente a la pared blanca de mi celda y le rezo a mi sombra. [11º PASO: Buscamos a través de la oración y la meditación mejorar nuestro contacto consciente con Dios, como nosotros lo concebimos, pidiéndole solamente que nos dejase conocer su voluntad para con nosotros y nos diese la fortaleza para cumplirla.] Le pido que me revele el plan completo. [12º PASO: Habiendo obtenido un despertar espiritual como resultado de estos pasos, tratamos de llevar el mensaje a los alcohólicos y de practicar estos principios en todos nuestros asuntos.] Pero mi sombra siempre calla con la altivez de un Dios ocupado con asuntos mucho más importantes.