Trasvase Júcar – Vinalopó: Al final del túnel
La máquina tuneladora con la que se ha construido buena parte del túnel de Barxeta, segundo y último de la Conducción Júcar-Vinalopó, ya ve la luz al final del túnel, al haber sido extraída este mismo fin de semana con un transporte especial por el emboquille norte ubicado en el término municipal de Simat de la Valldigna. Si a finales de mayo finalizaban las obras de calado del túnel, con la extracción de la tuneladora comenzará a construirse el canal de hormigón armado que permitirá en cuestión de semanas que el agua del curso bajo del río Júcar pueda llegar a las comarcas alicantinas del Vinalopó.
El túnel de Barxeta tiene una longitud aproximada de 3.600 metros y su construcción se ha llevado a cabo utilizando un planteamiento mixto: desde el emboquille norte con explosivos, y desde el emboquille sur con la misma tuneladora con la que se construyó el túnel de Corbera. Los dos túneles forman parte del tramo B, cuyo presupuesto ronda los 35 millones de euros y pasa por los términos municipales de Llaurí, Alzira, Carcaixent y Simat de la Valldigna.
La tuneladora en cuestión ha perforado en este túnel cerca de 2.100 metros en poco más de 6 meses, ejecutando una conducción de 3,42 metros de diámetro revestida con dovelas prefabricadas de hormigón de 15 centímetros de espesor. La parte del túnel construida con explosivos, alrededor de 1.500 metros, tiene una sección con forma de arco de 4,5 metros de altura y otros 4,5 metros de anchura. En ella se construirá ahora un canal rectangular de hormigón armado de 4 metros de ancho por 2,5 de alto. El presupuesto de ejecución material del túnel de Barxeta asciende a 11,2 millones de euros.
Prácticamente acabada
La Conducción Júcar-Vinalopó, cuyo principal objetivo es recuperar los acuíferos sobre-explotados del Vinalopó, supone una inversión aproximada de 320 millones de euros y cuenta con el respaldo de la Comisión Europea que financia el proyecto con 120 millones de euros a través de fondos FEDER. Se trata, por tanto, de una infraestructura estratégica para la Comunitat Valenciana, y muy especialmente para la provincia de Alicante, que permitirá trasvasar al Vinalopó hasta 80 hm3 de agua al año procedente de los caudales sobrantes en el curso bajo del río Júcar.
La Conducción está ya prácticamente acabada, a expensas de que finalicen algunas pequeñas obras, los trabajos relacionados con la instalación del telemando y se realicen las pruebas técnicas oportunas antes de su puesta en marcha.