Una obra del pintor de Carlos II y Felipe V para el futuro Museo de Villena
La familia Guillén adquiere y cede a la ciudad un cuadro del pintor villenense José García Hidalgo
La iglesia de Santiago ha sido escenario hoy del acto de presentación del cuadro “Lamentación”, del pintor villenense José García Hidalgo (1645-1717), adquirido en subasta por Julio Guillén y que se exhibirá en la Sala Capitular de la iglesia hasta la apertura del futuro Museo de Villena.
José García Hidalgo, cuyo origen villenero está más que documentado, fue un destacado pintor barroco, con una gran colección de arte religioso (el Museo del Prado atesora 22 de sus obras), que llegó a ser pintor de cámara con Carlos II y Felipe V, siendo autor de obras tan destacadas como el retrato de la reina María Luisa de Orleans o el Infante Don Luis. Además, fue autor de un destacado Tratado sobre Pintura, también depositado en el Prado, cuya cesión temporal está persiguiendo el Museo para poder ser expuesto en Villena, y que fue rescatado por el malogrado profesor Inocencio Galindo, autor de una edición facsímil que puede adquirirse en el propio museo.
Por su parte, Julio Guillén relataba la peripecia seguida hasta adquirir el cuadro, partiendo de las informaciones facilitadas por Mariano Ruiz, Celia Lledó, Ginés Pardo e indagando hasta acceder a Javier Portús, Jefe de Departamento de Pintura Española del Museo del Prado. Fue él quien, tras conocer el interés de Guillén y el ayuntamiento de Villena por la obra de García Hidalgo, informó de la salida a subasta, en Zaragoza, de la obra “Lamentación”, fechada en 1714. Finalmente, y tras asegurarse de la autenticidad de la obra, el empresario conseguía hacerse con la misma y la pone ahora a disposición de la ciudad.
El párroco de Santiago, Reyes Rodríguez, agradecía la cesión, celebrando que “hasta que el futuro Museo esté abierto, la obra, que es muy bella por todo lo que representa, estará en nuestra Sala Capitular, frente a la estatua de Santiago, y acompañando a la Morenica”. Por su parte, el alcalde agradecía una vez más el gesto de la familia Guillén y de “todas aquellas personas que contribuyen a descubrir y engrandecer nuestro patrimonio histórico, artístico y cultural”.
