Una Semana Santa pasada por agua

El hombre propone y Dios dispone. Y en ocasiones, lo que es bueno para una cosa, como el campo, causa trastornos y tristeza en las personas que llevan un año entero esperando para poder vivir y sentir unos momentos tan íntimos y especiales como los que solo depara como la Semana Santa.

Los problemas comenzaron el jueves, cuando la Junta Mayor de Semana Santa junto a las Cuatro Hermandades y Cofradías que procesionan en Jueves Santo en la procesión del Silencio decidieron suspender dicha procesión debido a las inclemencias meteorológicas. Por ello, finalmente se celebró en el interior de la Iglesia Arcedianal de Santiago una procesión Claustral con las cuatro Imágenes: Cristo de la Columna, Ecce Homo, Ntra. Sra. de las Angustias y Ntra. Sra. de la Soledad.

Desde entonces, las suspensiones no han dejado de sucederse. En primer lugar, el Encuentro, que en una decisión inédita se celebraba en el interior de la iglesia de Santiago, durante la mañana de Viernes Santo, con la Morenica como testigo de excepción.

También se suspendía la procesión del Entierro, en la que toman parte cinco Cofradías, siendo sustituida por un acto en el interior de la Iglesia de Santiago, donde se hizo una reverencia las distintas Imágenes hacia el altar.

Finalmente, la Hermandad del Stmo. Cristo de la Luz y Jesús Rescatado tomaba la decisión de suspender su procesión de las 12 de la noche desde la Capilla del Convento de las Hermanas Trinitarias. La Hermandad sacaba a la Imagen de Jesús Rescatado a las puertas del Convento para presentarlo al pueblo, y posteriormente dejaban la Capilla abierta para visitarla y pedir a Jesús en Oración.