Según el diccionario expoliar significa quitar con violencia. Y vista toda la parafernalia mediática que se ha montado por quitar la arena de la tan cacareada Plaza me parece que, o se equivocan al definir el término, o a algunos les interesa exacerbar a los exarcerbables. Y, cómo no, éstos salieron de su escondrijo dispuestos a dar a entender que la susodicha Plaza se arregló solo con el fin de que los ávidos de sangre disfrutaran lo suyo.
Se me ocurrió la brillante, a la par que estúpida idea, de preguntarle a cierto erudito en estos y otros temas qué expolio se estaba cometiendo, y fue tal su perorata que lo entendí menos que si llevase la boca llena de polvorones.
Si al decir expolio se refieren a la retirada de la arena, bien mirado, de expolio nada de nada, pues si esto es quitar con violencia no creo que nadie la haya quitado a hostia limpia. Vamos, digo yo. Pero como en estos tiempos lo que interesa es desviar la atención de lo que verdaderamente importa arreglar, siempre se buscarán cualquier excusa para que miremos hacia otro lado y, como somos tan lelos, lo haremos.
No le quito, ni quitaré la razón, al que aseguró que si hubiesen dejado que la Plaza se hundiera los problemas de Villena serían menores. Que cada cual piense lo que quiera, opine lo que desee, pero a los que nos la bufa todo este embrollo nos dejen, si no tranquilos, sí en paz.
Y como me tengo que tomar la medicación, este se va con un puñao de arena en el bolsillo a fin de ahorrarle un tanto a los del Ayun. Lo dicho, menos mal que hay pancartas engalanando los balcones, si no no me entero. Hasta mas ver, pues.
