Abandonad toda esperanza, salmo 27º
La octava edición de Unicómic, celebrada hace unos días en Alicante, ha venido a demostrar que los caminos de la publicación y la distribución son, como los del Señor, inescrutables. Así lo demostró el encuentro con Enrique Corominas, al que conocí hace un par de años y que desde entonces me honra con su amistad... y alguna que otra perversa recomendación, como cuando me descubrió los mangas enfermizos de Suehiro Maruo.
El autor de Eye Gray es uno de los creadores más exquisitos del cómic español, y sus obras nos llegan con cuentagotas, algo razonable visto el impresionante resultado final. Su último trabajo, Dontar, fue publicado en Francia antes de ver la luz aquí, y es una inquietante historia ambientada en la Inglaterra medieval, que viene a demostrar que estamos ante un artista que nunca defrauda, dado su dominio no ya del dibujo -con acuarelas de una belleza deslumbrante-, sino también de la narración... y más aún, del guión, ya que desde sus comienzos con Tragaldabas ha sido un verdadero autor total, y no un dibujante advenedizo que se mete a guionista ignorando su falta de oficio.
Lamentablemente, durante estas jornadas descubrimos que un desacuerdo entre el editor francés y varios de sus autores en nómina supondrá que las futuras entregas de esta maravillosa trilogía, probablemente, no vean nunca la luz. Aun así, la primera entrega puede y merece disfrutarse tal cual es, y su desenlace inconcluso no deja de dotarla de una perversa belleza. Además, como consolación, se perfila en el horizonte el proyecto de adaptar El retrato de Dorian Gray de Oscar Wilde, novela y escritor favoritos de Enrique...
Otro de los invitados más atrayentes del evento fue Eduardo Risso, reconocido dibujante de la serie negra norteamericana 100 balas. Pero si de una de sus obras se habló durante Unicómic fue de Parque Chas, escrita por el malogrado Ricardo Barreiro, y auténtica obra de culto para los amantes del medio: una serie de relatos entrelazados, que acontecen en el microcosmos que da título al volumen, y cuya edición argentina ha llegado directamente a España: si tienen la oportunidad, háganse sin dudarlo con uno de los escasos ejemplares de esta odisea fantástica, donde personajes reales y ficticios conviven en historias protagonizadas no por azar por un escritor, y donde lo que más miedo da no son los monstruos que se esconden en las sombras, sino el pasado que todos, por una razón u otra, tratan de ocultar.
De nuevo, fue un placer escuchar a autores y críticos debatir con seriedad y rigor aspectos del noveno arte que suelen pasar desapercibidos: más allá de polémicas editoriales e infantiles peleas acerca de quién ganaría en una pelea, si Superman o Thor, el encuentro con autores de la talla de Mike Kaluta o Stuart Immonen permitió conocer los entresijos de creaciones artísticas englobadas en eso que se ha venido a llamar arte secuencial. Que sea por muchos años.
Dontar de Enrique Corominas está editado por Recerca Editorial (2005); Parque Chas de Ricardo Barreiro y Eduardo Risso está editado por Puro Cómic (2004).
